Cortesía •  Redacción •  Actualidad •  09/02/2019

Cantabristas insta al Gobierno de Cantabria a que exija la reversión de los daños producidos por las obras de los espigones de La Magdalena

El partido soberanista considera que en este tipo de situaciones, “el Gobierno Autonómico debería tener capacidad de tomar decisiones vinculantes.

Cantabristas insta al Gobierno de Cantabria a que exija la reversión de los daños producidos por las obras de los espigones de La Magdalena

Cantabristas insta al Gobierno de Cantabria, tras las declaraciones del secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, a que exija la reversión de los daños ambientales y paisajísticos producidos por las obras de los espigones de La Magdalena. Así mismo, el partido soberanista ha afirmado que ante este tipo de situaciones, “el Gobierno Autonómico debería tener capacidad de tomar decisiones vinculantes” y lamenta la “postura incoherente” del Gobierno Estatal.

“El Ministerio tiene la posibilidad de revertir los daños y escuchar a la sociedad cántabra, que ya se ha manifestado en repetidas ocasiones en contra de este despropósito medioambiental”. Desde el partido cantabrista consideran “inaceptable” la “tibia postura” del Gobierno Estatal del PSOE con este tema, que paralizó las obras inicialmente y ahora abre la puerta a que se reanuden; y que el Gobierno de Cantabria debería tener competencias para actuar en estas situaciones. “No podemos permitir que se tomen decisiones que nos afectan desde fuera de Cantabria sin tener en cuenta la voluntad de la sociedad cántabra”, concluye Cantabristas.

Tras la presentación del informe del Centro de Estudios y Experimentación de Obras Públicas (CEDEX) queda claro que las obras no pueden quedarse como están. Por ello, desde Cantabristas piden que se “escuche a la sociedad cántabra, que ha estado meses luchando en la Plataforma Salvar La Magdalena para detener la construcción de los diques”. Del mismo modo, los cantabristas han denunciado que los “intereses particulares del Ayuntamiento de Santander no pueden priorizarse a la voluntad de la sociedad cántabra”. La pérdida de arena de las playas afectadas, explican, es un proceso natural que se puede paliar de formas menos agresivas, como se lleva haciendo ya mucho tiempo.


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