La Confederación Nacional del Trabajo (CNT) afirma que la acusación a “Pablo y Jorge” es un montaje y apoya sin fisuras a sus militantes

Durante el transcurso del juicio, los días 9, 10 y 11 de Abril, tendrán lugar actos de apoyo convocados por la CNT en diversas localidades

En las movilizaciones que siguieron a la huelga del 14 de Noviembre de 2012, en la Plaza del Espolón en Logroño, se produjeron varias brutales injustificadas cargas policiales que dieron lugar a dos heridos graves -uno con pérdida de visión parcial permanente en un ojo y otro con un fuerte golpe en la nuca que produjo su estancia en instalaciones hospitalarias durante dos días- y varias personas contusionadas entre los manifestantes.

Días después de los desordenes producidos por dichas cargas, tres personas fueron encausadas. Dos de ellas lo fueron en primera instancia. Jorge, acusado de delitos de desórdenes públicos, autor por inducción del delito de atentado a agentes de la autoridad, de un delito de lesiones, de cinco faltas de lesiones y de un delito de daños cualificados, y Pablo, acusado a su vez de desórdenes públicos, atentado con medios peligrosos y lesiones. La tercera persona no ha querido denunciar ni hacer pública su situación.

Se da la paradoja de que Jorge se encontraba en el momento de los sucesos a 50 kilómetros de distancia fichando para entrar en su trabajo y de Pablo hay multitud de material audiovisual donde se le ve durante los altercados sosteniendo una pancarta con las dos manos llamando a la calma.

Entre otras muchas irregularidades, los vídeos grabados por la policía misteriosamente han desaparecido y no han sido aportados como prueba de la acusación.

Para intentar subsanar dicha chapuza policial Fiscalía llegó a ofrecerles un trato con tal de que se declarasen culpables. En la vista de previa conformidad, en mayo de 2017, propuso reducir las penas, que habían llegado a ser de hasta 9 y 7 años de prisión, por multas sin entrar en la cárcel. Cosa que los compañeros declinaron tajantemente.

Actualmente las penas que les piden son de primero cinco años luego siete y finalmente seis años para Pablo Alberdi y de siete años, luego nueve y finalmente dos para Jorge Merino, dada la inconsistencia de las acusaciones.

Desde CNT vemos estas medidas parte de la escalada de castigo y persecución a las personas implicadas en luchas por un mundo más justo que se viene observando desde antes de la aparición del fenómeno social del 15M. Como elemento activo en las reivindicaciones, movilizaciones, huelgas y protestas, CNT no puede más que denunciar y manifestar su mas enérgica repulsa a todas las medidas y leyes que vayan en la dirección de coartar aún más nuestras libertades.