La FRAVM propone bajar de diez a cinco años el plazo para que los locales de apuestas cercanos a institutos se adapten a la nueva norma regional
- Es una de las alegaciones al Proyecto de Decreto de Establecimientos de Juego de la Comunidad de Madrid que la Federación Vecinal ha presentado hoy. También propone ampliar la distancia mínima entre locales y centros educativos a 500 metros o, como mínimo, a 250 metros, en vez de los 100 que establece el Gobierno regional
- La entidad ciudadana saluda el espíritu y algunas medidas de la propuesta regional (como la limitación del crecimiento anual de locales a un 1% y la distancia mínima de 300 metros entre los nuevos establecimientos) a la vez que alerta de riesgos como la apertura de nuevos locales en lugares que no tienen la calificación de zona de alta concentración
- El nuevo decreto es útil para limitar los nuevos salones y casas de apuestas, pero, ¿qué hacemos con los barrios que ya sufren su saturación? ¿Cómo proteger a su juventud y población más vulnerable?
La Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM), que desde hace más de dos años trabaja de manera intensa por una regulación restrictiva del fenómeno, valora como un paso importante el Proyecto de Decreto de Planificación de Establecimientos de Juego en la Comunidad de Madrid, aunque no sirve para resolver la saturación de estos locales que a día de hoy padecen algunos barrios y distritos de la capital y otros municipios. Además, sigue siendo demasiado permisivo con aquellos que se hallan cerca de centros de enseñanza no universitaria.
Con el fin de mejorar la nueva norma, esta mañana, un día antes de que termine el plazo de información pública, la Federación Vecinal, que agrupa a 290 entidades de toda la comunidad autónoma, ha registrado en la Consejería de Presidencia, Justicia e Interior de la Comunidad de Madrid un escrito de alegaciones al proyecto. Entre estas destaca la propuesta de ampliación a 250 metros como mínimo (lo ideal son 500 metros) de la distancia que deben guardar los locales de apuestas respecto a los centros de enseñanza no universitaria ya que el proyecto normativo consolida los 100 metros que establece el Decreto 42/2019. Además, la organización sugiere reducir el plazo de adaptación a esta limitación de los 10 años actuales a 5 años.
“Que se requiera a los locales que dispongan en cada una de las puertas de acceso de una persona encargada de realizar exclusivamente las funciones del servicio de control de admisión es una medida menor. En realidad, los establecimientos, estén cerca o no de un centro escolar no universitario, están obligados a tener un servicio de control de admisión y a impedir las entrada de menores y de personas inscritas en el Registro de Interdicciones al Juego. Que se les exija a los que están más cerca de los colegios que extremen los controles está bien, pero de lo que se trata es de que no haya tales locales”, sostiene la FRAVM en su escrito.
Alrededor del 90% de los centros educativos de secundaria e institutos de la capital tienen un local de apuestas a menos de 500 metros de sus puertas, y más de 50 se hallan a menos de 100 metros, según datos de un estudio de campo realizado por la propia federación en 2019 cuyos datos actualizó el pasado mes de octubre.
La FRAVM califica de acertadas tres cuestiones que recoge el proyecto regional. La primera es la limitación del crecimiento anual del número de establecimientos a un 1%, con un máximo de dos autorizaciones por año para Madrid y una para el resto de municipios. La segunda, la definición de las zonas de alta concentración, su identificación con distritos y municipios concretos y la prohibición de abrir en ellas nuevos locales. Y la tercera, la distancia mínima de 300 metros que ha de existir entre los nuevos locales.
Pero, ¿qué sucederá en el supuesto de que distritos y municipios que no se identifican como zonas saturadas superen la proporción de establecimientos por cada 10.000 habitantes que marca el decreto? “En su redacción actual la futura norma propiciará la apertura de nuevos locales de juego en otros ámbitos. Planteamos que el decreto ha de regular que cualquier distrito y/o municipio que alcance la ratio de referencia será automáticamente considerado zona de alta concentración y, en consecuencia, no se autorizarán nuevos establecimientos”, sostiene la Federación Vecinal en sus alegaciones.
Más allá de las consideraciones anteriores, el nuevo proyecto normativo de la Comunidad de Madrid resulta útil para limitar a partir de ahora la proliferación descontrolada de unos negocios que suponen la ruina de miles de familias, pero no para atajar el problema en las zonas hoy saturadas. ¿Qué medidas piensan tomar las administraciones para alejar a la población de estos lugares, en general de rentas medias y bajas, del fantasma de la ludopatía?
Según el último trabajo de campo de la FRAVM, cerrado el pasado mes de octubre, el municipio de Madrid mantiene 371 locales de apuestas activos. Carabanchel, con 45 de estos negocios, es el distrito que cuenta con un mayor número, seguido por Puente de Vallecas (43), Tetuán (32), Centro (31) y Latina (25). Si ponemos el foco en los barrios administrativos, San Diego (Puente de Vallecas), con 21, aparece como el barrio con un número mayor de locales, seguido de Vista Alegre (Carabanchel), con 19, Moscardó (Usera), con 14, Sol (Centro), con 13, y Aluche (Latina), con 12. Por detrás están Bellas Vistas (Tetuán) (10), Numancia (Puente de Vallecas), (10), Puerta del Ángel (Latina) (9) y Quintana (Ciudad Lineal) y San Andrés (Villaverde), con 7 cada uno.
Por calles, las más saturadas son Bravo Murillo, que acumula 16 locales, Marcelo Usera (14), Alcalá (12), General Ricardos (9) y la avenida de la Albufera (6).