El diputado de IU Toni Valero registra una iniciativa para impulsar un sistema de “bajas estudiantiles” que eviten los efectos de los problemas de salud mental entre la juventud

El diputado de Izquierda Unida por Málaga en el Grupo Plurinacional Sumar del Congreso y coordinador general de IU Andalucía, Toni Valero, ha registrado una iniciativa para impulsar la creación de un sistema de “bajas estudiantiles” que garanticen los derechos de aquellos estudiantes que enfrentan problemas de salud mental. Valero hace coincidir esta iniciativa con la celebración hoy del Día Mundial de la Salud Mental, unos de los temas sobre los que IU considera que es necesario prestar más atención ante las importantes carencias detectadas.

El diputado en el grupo de Sumar, que también es portavoz adjunto en la Comisión de Educación de la Cámara Baja, subraya que “la inseguridad laboral, el desempleo y el estrés económico de las familias afectan a la salud mental de niños y niñas”, tal y como  reconoce uno de los últimos informes elaborado por Save the Children. Según sus datos, España supera en cuatro puntos el porcentaje de jóvenes con trastornos de salud mental en comparación con la media de la Unión Europea (UE), alcanzando un 16,3%. Esta situación se agrava con la falta de expectativas y oportunidades, que impactan negativamente en el rendimiento académico de los jóvenes.

Valero destaca que a pesar de que un trabajador tiene derecho a una baja por problemas de salud mental, los estudiantes carecen de este recurso, lo que afecta seriamente a su desempeño escolar y autoestima.

De ahí que el parlamentario de IU plantee al Ejecutivo no solo la posibilidad de concretar normas sobre las mencionadas “bajas estudiantiles” o fórmula similar, sino que interroga a los ministerios competentes para que trasladen a nivel parlamentario “qué actuaciones va a llevar a cabo para hacer frente” a lo que califica sin rodeos como “crisis de salud mental en la juventud”.

Expone también que la falta de un sistema de bajas para estudiantes “se traduce en la pérdida de becas y oportunidades, además de agravar el riesgo de fracaso escolar relacionado con trastornos como la ansiedad y la depresión”. Por ello afirma que “existe una deuda pendiente en lo que respecta a la salud mental del estudiantado, y es urgente avanzar en la garantía de derechos en caso de enfermedad, como ya se hace en el ámbito laboral”.

Los datos del nuevo informe de UNICEF, ‘Barómetro de Opinión de la Infancia y la Adolescencia 2023-2024’, revelan que el 41,1% de los jóvenes entre 13 y 18 años ha experimentado problemas de salud mental en el último año y más de la mitad no ha buscado ayuda. La situación es crítica, ya que el suicidio se ha convertido en la primera causa de muerte entre jóvenes de 12 a 29 años.