Participa urge a Espadas utilizar medidas éticas para controlar la plaga de cotorras
Tras haberse paralizado la “ilegal” caza con carabina de cotorras, Participa Sevilla apuesta por poner en marcha lo antes posible una batería de medidas que logren controlar la plaga de cotorras que existe en Sevilla y sus negativas consecuencias para otras especies.
Tras conocer el 10 de julio, el inicio de resolución del expediente de contratación para la erradicación de cotorras mediante disparos de aire comprimido, Moreno ha celebrado “la marcha atrás” del Ayuntamiento de Sevilla, que, además, reafirma la tesis de Participa Sevilla, y numerosas organizaciones sociales, de que matar animales a tiros en los núcleos urbanos es ilegal. Además, según el concejal, “tenemos experiencias en Cataluña, Baleares, Málaga o Tenerife que demuestran que el control ético de la cotorra es posible”.
“¿Por qué, como en otras ciudades, hasta ahora no se han tomado medidas para prevenir esta situación? Además, el uso de carabinas no garantiza la muerte instantánea, ni evita la aparición de animales heridos en cualquier zona de la ciudad”, según Moreno, que ha recordado que estas aves no son ningún riesgo para la salud pública, ni molestan a ninguna comunidad de vecinos.
“Ahora es el equipo de Gobierno quien tiene que dar a conocer los nuevos y urgentes planes de actuación ante la plaga de cotorras”, ha reconocido el edil de Participa Sevilla, que ha apostado por poner en marcha medidas éticas de control de poblaciones y planes reales de protección para las especies amenazadas por las cotorras. En este sentido, podría controlarse su reproducción, podrían extraerse individuos de los nidos o colocarse algún tipo de redes o trampas para su captura.
Sin embargo, Participa Sevilla reconoce que estas aves sí suponen un riesgo y un peligro para las comunidades de otras especies catalogadas como vulnerables, como es el caso del nóctulo gigante (murciélago) y del cernícalo primilla. “Especialmente, en proteger a estas especies deben estar centradas las actuaciones municipales”, ha apostillado Moreno. En este sentido, desde Participa recogen algunas propuestas que vienen exigiendo desde hace años investigadores del CSIC y colectivos ecologistas y animalistas, como es aportar nuevos refugios y una mejor gestión forestal en los parques y jardines para reducir los peligros para el nóctulo gigante.
“Hasta ahora no tenemos constancia de la existencia de un plan integral de gestión de la fauna silvestre para la ciudad. Y ello debería haber sido lo primero para empezar a actuar”, según Moreno, que ha reconocido que con cotorras o sin ellas, la protección del nóctulo se puede realizar gracias a la instalación de nidos especiales. Igualmente, Participa denuncia que el Ayuntamiento de Sevilla tampoco ha aportado ningún informe que aclare cuáles son las consecuencias para el medio ambiente de la masiva población de cotorras.
Por último, Moreno ha hecho un llamamiento para que el equipo de Gobierno vuelva a contar con las numerosas organizaciones interesadas en la materia “para la planificación y ejecución de las próximas medidas a llevar a cabo”. “La reunión del pasado 3 de julio fue un total éxito en este sentido y es el camino que se debe marcar para lograr la mejor actuación posible”, ha concluido el edil de Participa Sevilla.