Denuncian «abuso de poder y mala praxis pedagógica en la Escuela Superior de Arte Dramático de Sevilla»
El alumnado denuncia, con más de una veintena de testimonios, estos hechos en las aulas y exige la revisión y reparación inmediata para acabar con las dinámicas de miedo y coacción.
El alumnado de la E.S.A.D. de Sevilla se moviliza tras el estallido de casos de abuso de poder y acoso sexual sacados a la luz en las E.S.A.D. de Galicia, Barcelona y Baleares. Donde se ha denunciado vejaciones hacia el alumnado por parte de los docentes durante décadas, se ha paralizado la actividad lectiva y ha estallado una reivindicación de forma contundente. A día de hoy, en estos centros, se ha conseguido suspender de la docencia a los profesores acusados, hacer dimitir a las pertinentes directivas y se sigue trabajando en la revisión y reparación de daños. En Sevilla se apoyan en estos hechos para hacer valer su denuncia y llamar a la movilización.
No solo el centro sevillano, sino que también otras escuelas han comenzado a movilizarse. Haciéndose evidente que no se trata de un problema aislado y particular, sino que responde a un mal endémico, un problema estructural derivado de una organización social patriarcal. Este se filtra a las enseñanzas artísticas, donde se trabaja desde la vulnerabilidad física y emocional, la cual deja al alumnado expuesto e indefenso. Además, en las aulas se establece una relación muy cercana entre docente-alumnado, lo que facilita el abuso.
Desde la Asamblea Estudiantil E.S.A.D. – Sevilla ha surgido el proyecto «Punto Morado«. Este proyecto está formado, desde hace dos meses, por un grupo de alumnas organizadas para crear una red de acompañamiento y apoyo a posibles víctimas de abuso, acoso, maltrato psicológico y mala praxis pedagógica. Este proyecto ha recibido más de una veintena de testimonios de alumnado y exalumnado, víctimas de algún tipo de abuso, los que acreditan que esto ocurre y que solo es la punta de una realidad profunda. Muchas otras víctimas siguen teniendo miedo y no se ven capaces de relatar su vivencia.
Tanto la movilización estudiantil en Sevilla como a nivel estatal, a través de la Coordinadora Estudiantil de Artes Escénicas, exige la expulsión de la docencia de los presuntos implicados y solicita una investigación por parte de la Inspección Educativa, la cual no muestra contundencia ante estos hechos. Además de solicitar una reparación de las víctimas con ayuda psicológica y jurídica externa, protocolos antiacoso y un espacio de visibilización y sensibilización dentro de las Escuelas. A fin de cuentas, que las Escuelas Superiores de Arte Dramático sean espacios seguros para su alumnado.