Redacción •  Actualidad •  13/11/2024

Continúan las movilizaciones en Carabanchel en defensa de la Sanidad Pública

  • Jueves 14 de noviembre de 2024 a las 18:30h, manifestación desde el Centro de Salud Abrantes, Avenida de Abrantes 55, hasta la plaza de Oporto.
  • Este jueves 14 de noviembre volvemos a convocar al vecindario de Carabanchel a la manifestación semanal en defensa de la Atención Primaria y de nuestros centros de salud. Una protesta que, desde hace ya cinco años protagonizan los y las vecinas del barrio de Abrantes para denunciar el abandono de su centro de salud, reclamar más profesionales y recursos y señalar el desmantelamiento por parte de la Comunidad de Madrid de la sanidad pública.
Continúan las movilizaciones en Carabanchel en defensa de la Sanidad Pública

La situación de la Atención Primaria -como la de los hospitales y de sus urgencias- es el resultado de decisiones políticas, de no destinar los recursos necesarios al Servicio Madrileño de Salud (SERMAS). Es decir de no otorgar a la salud de la población prioridad sobre otro tipo de gasto. Es lo que denunciamos con las movilizaciones en defensa de la la sanidad pública.

Sin embargo en la Comunidad de Madrid, el gobierno regional sigue sin destinar los recursos necesarios para revertir el agotamiento del SERMAS.

La administración madrileña, que a principios de mes hacía público su proyecto de presupuestos de 2025, destacaba en una nota de prensa que “la Sanidad madrileña vuelve a ser la que acapara la mayor parte de los recursos, con 10.459 millones de euros y un incremento del 2,9 por ciento respecto al pasado ejercicio. Se trata, un año más, del presupuesto más elevado de la historia”.

Pero tras analizar los datos con detenimiento la Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública de Madrid valoraba que estos 10.459 millones de euros son “totalmente insuficientes, sobre todo si se tiene en cuenta que el gasto sanitario anual reconocido por la propia Comunidad es superior a esta cifra desde el año 2021” y puntualizaba que en 2023 se gastaron nada menos que 903 millones más que el proyecto de presupuesto para 2025.

Por otro lado, el presupuesto sanitario per cápita también es claramente muy bajo, 1.520,88 € por habitante y año, muy inferior al promedio de presupuesto por habitante y año de las CCAA en 2023 (1.815,55 €), de esta manera lo más probable es que el presupuesto sanitario per cápita madrileño siga colocándose en el último o penúltimo puesto entre las Comunidades Autónomas en 2025. 

En resumen, valora la asociación de defensa de la sanidad pública, la Comunidad “sigue desfinanciando la Sanidad Pública para continuar su deterioro y fomentar la huida de la población con mayores ingresos hacia el sector privado”.

Lo que necesita la Sanidad madrileña es aumentar el presupuesto total y el dedicado a la Atención Primaria (es una de las Autonomías que menos euros destina por habitante y año) y dejarse de maniobras de marketing y distracción. La falta de una inversión adecuada se traduce en el agotamiento de profesionales sanitarios desbordados, esperas para citas, retraso en diagnósticos e incapacidad para atender necesidades crecientes de salud.

La Atención Primaria -conformada en gran medida por los Centros de Salud que hay en cada barrio-, es la base del sistema sanitario público ya que en ella se resuelven en la actualidad más del 80% de los problemas de salud de la población. Pero para que la Atención Primaria sea eficaz debe tener recursos para atendernos adecuadamente.

Abandonar la Atención Primaria, que es además la puerta de entrada al conjunto del sistema sanitario es, en definitiva, abandonar el acceso a la salud como derecho fundamental.

Eso bien lo notamos en el centro de salud Abrantes, que atiende a un barrio de 30.000 personas, con una importante población envejecida y dependiente, y cuya situación actual es un caso especialmente sangrante de los recortes en la Atención Primaria y en la Sanidad Pública madrileña: actualmente su número de médicos/as de familia estables oscila entre 7 y 9 -depende de las bajas o vacaciones- cuando sobre el papel debería tener 17. Y entre uno y dos pediatras estables cuando debería tener cuatro (ninguno en el turno de tarde).

Estos recortes tienen efectos cotidianos y brutales sobre la salud de las miles de personas que dependen de este consultorio. Sirva como ejemplo que es normal tener que esperar más de un mes para tener una cita con el/la médico/a de cabecera.

Luchemos por una sanidad pública, universal y de calidad, no sólo para el barrio, sino para toda la Comunidad de Madrid. Estamos hablando de una cuestión de derechos y de salud. ¡No nos mires y únete! ¡Por ti, por el barrio!


Carabanchel /