Los sindicatos denuncian despidos en represalia por las huelgas y movilizaciones en Amazon
La CGT afirma que los despidos no están justificados y responden claramente a una estrategia de represión e intimidación de la compañía a los trabajadores en huelga del centro logístico de San Fernando de Henares.
Hasta cinco empleados del centro logístico de Amazon en San Fernando de Henares, Madrid, han recibido a lo largo de los últimos días expedientes disciplinarios que les abocan a un inminente despido. Unos expedientes disciplinarios que, en opinión de las organizaciones sindicales de la planta, no tiene ninguna justificación real y es una mera estratagema para tomar medidas represivas contra las significadas durante las movilizaciones y huelgas que desde hace meses vive este centro de la multinacional.
“Entre los compañeros despedidos figura el compañero José Pedro, contra quien aducen absurdas razones tratando de inculparle dos faltas muy graves por indisciplina y mala fe en el trabajo”, señala la sección sindical de Amazon MAD4 del sindicato CGT. “Resulta curioso que fuera el compañero el único que, sin pertenecer al Comité de Empresa y ostentando esa protección legal, fuera entrevistado por las cámaras de “En el punto de mira” de la cadena Cuatro frente al centro de trabajo criticando las condiciones laborales y la imposición del nuevo convenio”, añaden, apuntando a la voluntad de la compañía por lanzar un mensaje para intimidar al resto de empleados de la planta de San Fernando de Henares para que no continúen con la movilización.
La compañía se ha negado en todo momento a sentarse a negociar con los representantes sindicales, continuando con su plan de liquidar el convenio colectivo del centro para aplicar el convenio regional de logística. Con esta medida, Amazon aspira a establecer unas condiciones más precarias y reducir sus costes en personal en la planta, mientras bate records de facturación gracias al incremento exponencial del comercio digital en nuestro país. Este año, la compañía prevé superar la cifra del millón de productos vendidos en un solo día durante el llamado Prime Day, una jornada promocional inventada por la propia Amazon que se ha tornado un fenómeno anual de ventas.
Las organizaciones sindicales ya habían denunciado las pasadas semanas estratagemas por parte de la compañía, como amenazas o intentos de soborno tan absurdos como invitar a los empleados que no secundasen los paros a un catering. Los sindicatos, por su parte, han venido anunciando su intención de mantener las movilizaciones durante los próximos meses si continúa la actitud de la dirección de Amazon.
“Para CGT queda claro que se trata de represalias hacia compañeros que se han mostrado especialmente críticos hacia las prácticas de la empresa y que se “abre la veda” así a nuevos despidos próximamente”, indican desde la central sindical, apuntado a que los despidos, amparados en supuestos expedientes disciplinarios, serían un paso más en la estrategia del gigante del comercio digital para detener las protestas sin ceder en un solo punto. “Se trata de una medida disciplinaria que llevaba sin aplicarse desde el verano pasado y que vuelve a instaurar la “política del miedo” en el día a día de Amazon”, añaden.
Sin embargo, desde CGT sostienen que las movilizaciones que se iniciaron en marzo van a continuar hasta que el sindicato asuma la imposibilidad de implantar unilateralmente un empeoramiento de las condiciones de los empleados de la planta. Unas movilizaciones que tendrán un punto especialmente álgido dentro de escasas semanas, cuando la compañía celebre su Prime Day con una plantilla en huelga.
Sanciones de inspección de trabajo
Mientras tanto, la Inspección de Trabajo ha anunciado que tomará medidas de sanción ante las irregularidades que está cometiendo la compañía en su política de contratación. Según la resolución del organismo adscrito al Ministerio de Trabajo, la compañía abusó sistemáticamente de la contratación a través de contratos temporales de forma injustificada. En la misma obliga a la multinacional a transformar los contratos de 28 de sus empleados en contratos indefinidos.
Según se denuncia desde las centrales sindicales, Amazon ha empleado el mecanismo de establecer contratos como eventuales en torno a la mitad de los empleados de la planta, cuando ningún convenio laboral, ni siquiera el que la propia compañía trata de establecer unilateralmente en el centro logístico de San Fernando, permite la contratación de más de un 25% del personal como eventual, siempre bajo justificaciones de motivos coyunturales de aumento específico del volumen de trabajo.
En un comunicado, la central sindical CCOO, responsable de la solicitud de la inspección laboral, sostiene que todos los empleado deberían figurar como contratados indefinidos por tratarse de puesto de trabajo estructurales. La central señalaba que la resolución de Inspección de Trabajo no solventa la situación irregular de cientos de empleados de la planta y que tan solo supone un comienzo.