Sí a la Tierra Viva consigue la adhesión del PSOE a su manifiesto contra la minería de tierras raras
Desde la plataforma ciudadana se valora muy positivamente el paso dado por la Secretaria de Organización del PSOE de Ciudad Real Blanca Fernández, que en nombre de la Comisión Ejecutiva Provincial ha firmado el documento, uniéndose así a otras formaciones políticas como Podemos, Izquierda Unida y Equo.
Sí a la Tierra Viva espera «que este sea un primer paso» para que el Gobierno regional cumpla el mandato ciudadano expresado por la resolución aprobada por mayoría en las Cortes Regionales (PP y Podemos) el pasado 19 de mayo, que pide el archivo de los expedientes mineros de tierras raras en Ciudad Real.
La entidad afirma no entender que el Gobierno socialista de Emiliano García-Page continúe ahora adelante con la tramitación ambiental del plan minero, cuando además, su Ejecutivo era ya conocedor de la negativa de la Confederación Hidrográfica del Guadiana a la empresa a partir de los informes técnicos negativos.
Con la adhesión del PSOE, Sí a la Tierra Viva espera que tanto Ciudadanos como el Partido Popular, que ya han manifestado públicamente su oposición a estos proyectos, hagan también efectivo su rechazo a la luz pública.
UNA ZONA DESTACADA
Desde la Plataforma indica que la zona elegida «es rica en valores naturales que coexisten con una producción agrícola y ganadera de calidad y una industria agroalimentaria consolidada y con futuro» compatible al cabo del tiempo «con un patrimonio natural en el que perviven las especies más singulares de la fauna mediterránea» como el lince ibérico, el águila imperial, el águila perdicera y el buitre negro. Además, el área afectada forma parte de la Red Natura 2000 e incluye la Zona de Protección para las Aves (ZEPA) Campo de Montiel, aparte de la existencia de yacimientos arqueológicos de gran relevancia.
Para Sí a la Tierra Viva, la minería de tierras raras en Ciudad real comprometerá «el desarrollo sostenible presente y futuro del territorio poniendo en riesgo un modelo de vida compatible con la conservación del patrimonio natural y cultural«, po lo que solicita que no se lleve a cabo el plan minero «en una tierra viva que ha sabido conciliar un modelo social y económico con el mantenimiento de ese patrimonio».
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