CGT afirma que la militarización de las aguas y fronteras españolas no detendrá los flujos migratorios

La Confederación General del Trabajo (CGT), a través de un comunicado, ha manifestado que la designación de un general de la Guardia Civil como mando único operativo para coordinar las actuaciones contra la inmigración en el Mediterráneo es una medida totalmente alejada de los valores “socialistas” por los que supuestamente se rige el nuevo Ejecutivo y, además, es contraproducente por entenderse que la Guardia Civil es un cuerpo militar con unas funciones muy concretas que nada tienen que ver con las labores desempeñadas por las tripulaciones de Salvamento Marítimo.

CGT ha señalado en este comunicado que detrás de esta decisión existe la voluntad de recuperar un proyecto elaborado por la ‘Fundación Alternativas’, muy próxima al PSOE, consistente en la creación de un cuerpo especial de guardacostas dedicado a “ahuyentar” la “inmigración ilegal”, primando por encima de cualquier vida humana que se encuentre en peligro en la mar otros intereses.

En este sentido, la organización anarcosindicalista ha recordado que ningún ser humano es ilegal ni emigra por gusto, y que las personas que llegan a nuestras costas tienen motivos justificados para ser tratados con respeto y dignidad, máxime cuando son los Estados del Primer Mundo, como los europeos, los causantes de muchas de las situaciones por las que atraviesan estas personas en sus países de origen.

CGT también subraya que salvar vidas en la mar es la única regla que impera en situaciones extremas, siendo este el objetivo fundamental por el que se creó hace ahora 25 años Salvamento Marítimo, un ente público conformado en tu totalidad por personal civil. En este sentido, el sindicato también ha manifestado que las tripulaciones de Salvamento Marítimo, en lucha desde hace años contra la explotación y la precarización de la profesión, solo rescatan náufragos para llevarlos a puerto seguro con independencia de su nacionalidad, y rechaza todos aquellos “juicios” que se vienen realizando desde algunos sectores de la sociedad que pretenden culpabilizar a la Clase Trabajadora de una situación creada y fomentada por la avaricia y la insolidaridad de los gobiernos europeos.