La Marea Blanca solicita al gobierno una auditoría de la gestión sanitaria en la Comunidad de Madrid

La Mesa en Defensa de la Sanidad Pública de Madrid – Marea Blanca ha registrado una petición urgente de Inspección y Auditoría a la Comunidad de Madrid  ante la Subdirección General de Cohesión y alta Inspección del Sistema Nacional de Salud, dependiente del Ministerio de Sanidad. La solicitud llega motivada por la inquietud en la plataforma ante la gestión de las autoridades autonómicas de la crisis sanitaria generada por la enfermedad del coronavirus COVID-19.

Para la MEDSAP, la gestión «irresponsable y caótica», no responde las principales necesidades del sistema sanitario para hacer frente a la pandemia, como la necesidad de contar con personal sanitario, recursos, claridad operativa para todos los niveles asistenciales y refuerzo de la Atención Primaria y Hospitalaria. Así mismo, advierte de la ausencia de una red de rastreadores con los ratios establecidos por la Organización Mundial de la Salud para identificar posibles brotes de la enfermedad.

«Se toman decisiones peligrosas y contradictorias», afirman desde la Marea Blanca. «Ninguna de estas decisiones se han tomado en función de la necesidad de garantizar la salud de casi 7 millones de personas, sino que, muy al contrario, continúan con sus rutinas depredadoras de la Sanidad Pública», afirman en un comunicado, haciendo referencia a la política de privatizaciones que los sucesivos ejecutivos autonómicos han seguido desde hace años.

La MEDSAP indica que la solicitud de auditoría se realiza con especial atención a cuatro materias: la situación del personal sanitario, las listas de espera, el número de rastreadores y el desvío de fondos y recursos a entidades privadas.

La Marea Blanca ha mantenido una posición muy crítica con la polémica gestión realizada por el gobierno de la presidenta Isabel Díaz Ayuso y el el consejero de sanidad Enrique Ruíz Escudero. el último capítulo de este desencuentro ha sido la privatización de los servicios de rastreadores, en un número muy inferior a los ratios recomendados por las autoridades sanitarias a nivel mundial. El cierre de centros de salud y otros recursos de atención primaria, las propuestas de privatización y externalización de servicios sanitarios o el conflicto con los MIR han sido otros de los elementos más criticados de la gestión del gobierno de la Comunidad de Madrid durante los meses de pandemia.