Compromís exige a Mazón soluciones a la creciente morosidad del Consell
- Esteve: «Que el gobierno del PP tarde tanto en pagar puede llevar a muchas pequeñas empresas a la ruina, ya que no tienen la capacidad de aguantar períodos sucesivos tan largos sin cobrar por los trabajos realizados».
El diputado de Compromís, Carles Esteve, expresó su preocupación por los datos recientes que sitúan el territorio valenciano como la autonomía con el período medio de pago a proveedores más alto de España, con 43 días. Ante esta situación, Esteve registró una iniciativa parlamentaria en las Cortes Valencianas para pedir explicaciones a la Consejera de Economía, Hacienda y Presupuestos, Ruth Merino, y conocer las medidas que se tomarán para corregir esa morosidad creciente.
“En sólo un año, hemos pasado de ser uno de los territorios que más rápidamente pagaban a las empresas, PYMES y autónomos, a ser los últimos de la cola. Esto no es un simple dato; implica que las empresas que trabajan con nosotros no cobran a tiempo, convirtiéndonos en sus morosos. Estamos hablando de más de 43 días de retraso en los pagos”, ha señalado Esteve.
Compromís recuerda que desde el pasado mes de marzo vienen solicitando sin éxito que Merino comparezca en Les Corts para dar respuesta a esta situación. “La consellera de Hacienda parece no tener intención de abordar esta cuestión más allá de sus ruedas de prensa en las que se limita a repetir las palabras eficiencia y eficacia sin aterrizar en su acción de gobierno, sin explicar este desastre, burlando de las valencianas y los valencianos”.
El diputado ha subrayado que una de las obligaciones de los poderes públicos es facilitar que las PYMES y los autónomos trabajen con la administración, tal y como establece la ley. “Esto se justifica porque se busca generar un ambiente de competencia y garantizar que las empresas de menor tamaño puedan mantener su actividad e incluso crecer. Esto debería ser una prioridad en una autonomía como la nuestra, donde más del 90% del tejido empresarial son PYMES y autónomos”, ha añadido.
Esteve ha advertido de que la morosidad del Consejo de Mazón puede llevar a muchas pequeñas empresas a la ruina, ya que no tienen la capacidad de aguantar períodos sucesivos tan largos sin cobrar por los trabajos realizados. “Si el gobierno no paga, las empresas pueden optar por no trabajar con la administración o, peor aún, cerrar sus puertas”, ha dicho.
Por último, Esteve ha criticado que esta situación beneficia a las grandes empresas en detrimento de las PYMES, reduciendo la competencia y afectando negativamente a la economía local. «El señor Mazón y la señora Merino, que hacen gala de su liberalismo, deberían ser los primeros en defender este fundamento básico de su doctrina», concluyó.