Greenpeace y #DesnudaLaFruta llenan las redes de frutas y verduras sobreenvasadas para pedir a los supermercados que eliminen el plástico
- Las organizaciones demandan responsabilidad a los establecimientos para luchar contra el plástico en el origen.
- La campaña pide a la ciudadanía que haga fotos de los productos sobreenvasados que encuentren y las compartan en redes nombrando al supermercado en el que los han encontrado.
- Los supermercados y las corporaciones tienen un papel crucial ya que la mayoría de sus productos están sobreenvasados y ofrecen escasas alternativas.
Greenpeace continúa su campaña internacional dirigida a los supermercados, a los que demanda un compromiso con los océanos a través de un cambio en sus establecimientos: que eliminen de las estanterías los plásticos de un solo uso y ofrezcan alternativas sostenibles, como la venta de productos a granel o sistemas alternativos de distribución. La organización considera clave que los supermercados y las corporaciones lideren ese cambio para conseguir frenar la crisis global de los plásticos y tiene en marcha una petición. Solo así las personas podrán realizar una compra más sostenible. Enmarcado en esta iniciativa durante toda esta semana Greenpeace y #DesnudaLaFruta se unen para llenar las redes sociales de imágenes de frutas y verduras tan sobreenvasadas que llegan a ser ridículas. Ambas organizaciones piden a la ciudadanía que se sumen con sus fotografías etiquetando a los supermercados que venden esos productos a través del movimiento #DesnudaLaFruta, #BreakFreeFromPlastic y #RidiculousPlastic.
“En la mayoría de tiendas de alimentación y grandes superficies es casi imposible evitar comprar sin envases de plástico”, ha declarado Alba García Rodríguez, responsable de la campaña de plásticos de Greenpeace. “Estamos condicionados a pensar que nuestra fruta y verdura necesita estar envuelta en plástico, aunque sepamos que la naturaleza ya ha pensado en ello y cuenta con sus propias capas” ha añadido.
Durante años se ha permitido a las empresas la producción en masa de productos de plástico de un solo uso y se ha fomentado un consumo desenfrenado de los mismos. Actualmente las empresas no se están haciendo responsables de los productos que venden y se está desplazando la responsabilidad hacia las personas consumidoras. Sin embargo, cada vez son más las personas que rechazan el viejo discurso de que los plásticos de usar y tirar son inevitables y que son conscientes de que el reciclaje no es ninguna panacea frente a la contaminación por plásticos.
“No es suficiente con que llevemos nuestra propia bolsa a los supermercados e intentemos reducir el plástico que consumimos de forma individual” ha comentado Alba García. “Es necesario que los supermercados lideren este cambio y comiencen a ofrecer alternativas. De lo contrario, estos residuos seguirán llegando en cantidades ingentes al medio ambiente, y afectando tanto a la fauna marina como al ser humano”, ha apuntado García.
Los plásticos nos invaden
Nuestra cultura del usar y tirar está destruyendo el medio ambiente. La producción de plásticos sigue aumentando cada año a un ritmo alarmante y solo una pequeña cantidad de lo que se produce se reutiliza o recicla. En 2011, más de 690 mil toneladas de envases de plástico se pusieron en el mercado solo en España, donde se recicla menos de un 35% de esos envases cada año. A nivel mundial, se sabe que tan solo un 9% del plástico total producido hasta la fecha se ha reciclado, el 12% se ha incinerado y el 79% restante ha acabado en vertederos o en el medio ambiente.
Esta ineficaz gestión y uso masivo de plásticos, genera una gran cantidad de residuos que cada día llegan a nuestros ríos y playas por el viento o la lluvia, que los arrastran desde donde hayan sido depositados o desechados de forma irresponsable. Cada año, más de 12 millones de toneladas de plástico llegan al mar, de los cuales el 80% procede de fuentes terrestres.
Los plásticos en el mar causan graves impactos en la fauna marina. Se sabe que hasta 9 de cada 10 aves marinas, 1 de cada 3 tortugas marinas, y más de la mitad de especies de ballenas y delfines han ingerido plástico en alguna ocasión. Más de 550 especies de animales marinos ingieren objetos de plástico y/o se enredan con ellos, obstaculizando su desarrollo vital, y en algunos casos causando su muerte.