La aplicación de la normativa de bienestar en porcino podría aplazarse un año
- La iniciativa presentada ahora por el MAPA parece seguir el camino marcado por aquellas grandes producciones orientadas al mercado internacional y que prefieren competir a precio con un producto indiferenciado e igualado por abajo en calidad y condiciones de cría de los animales.

Comunicado Asociación Nacional para la Defensa de los Animales (ANDA)
17 de marzo de 2025. El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) ha presentado una propuesta para aplazar durante un año varios aspectos de la normativa europea de bienestar animal en la cría de ganado porcino. Entre ellos hay aspectos tan importantes como la reducción de densidades y la prohibición de «raboteo» (amputación rutinaria del rabo de los cerdos) algunos de los cuales, como el raboteo, estaban en teoría ya prohibidos desde el año 2002. En el año 2023, un Real Decreto establecía los procedimientos y tiempos de adaptación para el cumplimiento de estos requisitos, estableciéndose el mes de Marzo del 2025 como tiempo límite para esta adaptación. Ahora el MAPA propone ampliar este plazo un año más.
Desde ANDA pensamos que esta medida es injusta. Dudamos de que lo que no se ha hecho en 23 años, se vaya a cumplir por alargar un año más el plazo. No es un problema de «plazos» sino de falta de voluntad por parte de un segmento del sector porcino, inmovilista, que se ha negado ha realizar cambios, a pesar de los buenos años de facturación que han disfrutado.
En ANDA somos conscientes de que existe una parte de los productores de porcino, orientados al mercado nacional y europeo, que sí desea integrarse en la adaptación y el cambio, y que quiere mejorar la imagen de su producto haciéndolo más atractivo para el consumidor de la Unión Europea apostando por la calidad, la excelencia y la diferenciación. Sin embargo la iniciativa presentada ahora por el MAPA parece seguir el camino marcado por aquellas grandes producciones orientadas al mercado internacional y que prefieren competir a precio con un producto indiferenciado e igualado por abajo en calidad y condiciones de cría de los animales.
Desde ANDA creemos que esta propuesta es negativa para la imagen del producto cárnico porcino en su conjunto, especialmente en un sector como el porcino de capa blanca en el que no existe en el consumidor una percepción de diferenciación entre tipos de producción. Al igualarlo todo en un concepto de competitividad a precio, pierden aquellos que han querido apostar por la calidad y un mercado diferenciado de mayor capacidad adquisitiva.
ANDA apuesta por la producción ganadera como actividad rural, palanca del desarrollo social, respetuosa con los condicionantes medioambientales y el bienestar animal. Por este motivo nos sentimos decepcionados por esta iniciativa del MAPA que parece fomentar e insistir en un modelo de producción ganadera único, ya obsoleto y contrario a los deseos del consumidor de la Unión Europea.
De hecho, pensamos que sería mucho más positivo de cara a la viabilidad futura de este sector productivo que se establecieran mecanismos, como la diferenciación en producciones de porcino de capa blanca, que fomentaran y animaran la adaptación de este sector hacia modelos distintos más adaptados a las exigencias del mercado europeo y reconvertido en referente de competitividad por calidad, excelencia y diferenciación.