La 64ª Marea Blanca abrazará este domingo el hospital de La Paz
La Mesa en Defensa de la Sanidad Pública de Madrid, MESAP - Marea Blanca, convoca a una nueva movilización que rodeará el hospital de La Paz a partir de las 12 de la mañana del próximo domingo.
MESAP - Marea Blanca quiere destacar que los hospitales son nuestros, que exigen cambios serios en su gestión, que rechazan interferencias de erróneas prácticas políticas con un bagage evidentemente ideológico, así como los habituales titulares improvisados y mediáticos que mantienen un caos manifiesto para cualquier tipo de administración que se precie.
Comunicado Marea Banca
19/01/2018. Un Servicio Público debe de ser estable y eficaz, con garantías de satisfacción a la ciudadanía, dueña y propietaria del mismo; a ello, han de dedicarse todos aquellos políticos y ayudantes elegidos a dedo; su trabajo no depende de su partido, sino de toda la población. Las fórmulas neoliberales no entienden de esto y no lo entenderán nunca, mutan el sentido de las palabras, trastocan la esencia de su significado adaptándolo según sus propias necesidades particulares; no entienden de verdadera democracia, ni que la soberanía del pueblo es el cuerpo del Estado y los Servicios Públicos, como no puede ser de otra forma, su esqueleto. El ejemplo, es cotidiano y en la Sanidad Publica muy lesivo porque se prioriza la economía, mercantiliza la salud y la curación; se aplican recortes temerarios para que las finanzas sigan dando beneficios con el dinero de todos, fomentando el endeudamiento del país con una deuda creada “ad hoc”, chantajista y artificiosa; deuda impagable que nos mantendrá esclavos; deuda que ha batido su propio record por el momento; sin embargo, no importa que la población se precarice, enferme o que, por decisiones políticas negligentes, muera antes y con mayor sufrimiento. Para resolver la problemática de su Salud está la Sanidad Pública, último recurso ante procesos de enferdad de toda índole. Y, sin embargo, este modelo político con mayoría de ejecutores, curiosamente provenientes del funcionariado, hacen caso omiso y sigue su catecismo fundamentalista de que los Servicios Públicos son muy caros; que la Sanidad Pública es la que más cuesta y que debe ser el ente privado el que nos salve de ello; estupenda argumentación para propiciar que sean los mercados los reguladores para acabar siendo titulares del patrimonio público mientras hacen desaparecer su obligación política de control por cuenta nuestra. Como vemos cada vez que sucede algún incidente que da alas a lo mediático, echan la culpa a la empresa concesionaria del caso. Esta es la causa de que llevemos 64 Mareas Blancas y que vayamos a tomar nuestro Hospital Universitario de la Paz, de 53 años de edad, uno de los buques insignia de nuestra Sanidad Pública. Un complejo que tiene 17 edificios y cuenta con el Hospital General, la Maternidad, el Infantil, el Traumatológico, además de los centros de salud y especialidades y de la adscripción de los Hospitales de Cantoblanco y del H. Carlos III; un referente nacional e internacional y en su momento, el único para cirugías de urgencia; que nos costó, sin contar el Hospital General ,porque no lo dicen en ninguna parte, 2.682.841 €, es decir 447.084.721 de las antiguas pesetas de entonces; nuevas construcciones y el coste de éste aumentarían significativamente la cifra.
Los más de medio millón de usuarios provenientes del Norte de Madrid y de pueblos de la Comunidad, se ven cada día con enormes problemas en las urgencias; en las listas de espera; en la adjudicación de camas; en esperas interminables; en los peligros por descalabros como inundaciones y caídas de techos, etc… con la ansiedad y malestar que todo ello produce contradcitoria con el hecho sanitario. Estos no son fenómenos climatológicos, sucede porque las urgencias están saturadas continuamentey no en picos como dicen; porque falta personal de todas las categorías en todos los serviciios sanitarios y no sanitarios, dificultando más y más la atención; porque la inversión se ha ido reduciendo, siendo la mengua de 23 millones respecto al 2016; porque se han perdido camas de hospitalización (52 menos que en 2016); porque mientras la Consejería de Sanidad pide humanización como método en el trabajo de los sanitarios, no se aplica el cuento y sigue reduciendo personal, no poniendo medios permanentes de acuerdo a ratios lógicos que están muy por debajo de la media europea; porque ella, que debe coordinar la mejor orquesta, provoca que los profesionales estén enfermando también y entren en un estrés inasumible muy preocupante que no sólo les produce malestar, dolor y llantos, sino que los maltrata en vez de procurar sanamente por ellos para que a su vez nos beneficiemos todos. Es un cinismo inaceptable y, sobre todo, un plan que destruye el futuro. Avisamos para que no sigan intoxicando a los Medios con datos publicados por un Monitor de Reputación Sanitaria, pretendidamente independiente, que sin embargo lo hace una empresa privada: Análisis e Investigación, a conocer. Y dice que es este el hospital primero en el ranking de los hospitales públicos. No necesitamos que ninguna empresa valore lo que no hemos pedido; esto no es una competición que viene a halagar a vanidosos; en definitiva, esa valoración nos corresponde en cada espacio nuestro y la hacemos al estimar el esfuerzo personal de aquéllos profesionales que con sus conocimientos, trabajos y, sobre todo, con su propio riesgo nos cuidan, a pesar de esos truenos de una peligrosa tormenta alimentada desde la gestión política que esperamos amaine cuanto antes.