CCOO denuncia que la reforma laboral sigue precarizando la contratación indefinida
Un estudio elaborado por la central sindical indica que con la actual legislación en materia de trabajo, la inestabilidad y precariedad se está extendiendo en todos los sectores. El 37% de los contratos indefinidos no llega a cumplir 1 año y el 50% no llega a alcanzar los 2 años de antigüedad.
Un estudio del Gabinete Económico confederal de CCOO revela que, como resultado de la reforma laboral de 2012, se necesita firmar más contratos indefinidos que antes de la reforma para consolidar un empleo estable. En 2018 se firmaron 1,6 contratos indefinidos por cada nuevo empleo indefinido que se mantenía a final de año, cuando antes de 2012 solo requería entre 1,1 y 1,2 contratos.
Antes de la reforma laboral de 2012 – una apuesta del Gobierno del PP de mejorar la rentabilidad empresarial a costa de “comprimir” salarios y derechos laborales, que el Gobierno del PSOE en su breve etapa no ha derogado en sus aspectos centrales -, la inmensa mayoría de las contrataciones indefinidas de un año (85-90%) se mantenían al finalizar el año. Desde entonces, solo el 63% de los contratos indefinidos firmados en 2018 seguían activos a fin de año. En el caso de los contratos indefinidos que duran al menos entre 1 y 2 años, la supervivencia media se reduce todavía más y se limita al 50%. Es decir, la mitad de los contratos indefinidos no siguen activo dos años después de ser firmados.
La rotación y la precariedad en la contratación indefinida y la menor consolidación en empleo estable se producen en todas las comunidades autónomas, pero con una intensidad desigual entre unas y otras. Así, si la probabilidad de que un contrato indefinido firmado en 2018 siga activo a final de año como empleo indefinido es del 63% a nivel nacional, en Cataluña (49%) o Madrid (53%) es mucho menor, donde uno de cada dos contratos indefinidos suscritos causa baja antes de cumplir un año. Por el contrario, en Navarra, Castilla y León o la Rioja, al menos el 80% de los contratos indefinidos se traducen en empleo vivo a fin de año.
La supervivencia de la contratación indefinida es todavía menor si se aumenta un año su antigüedad. La probabilidad de que un contrato indefinido registrado en 2017 siga activo a finales de 2018 baja al 50% a nivel nacional, y hasta el 39% en Baleares, el 42% en Madrid o el 43% en Cataluña. Baleares, La Rioja y Comunidad Valenciana son las comunidades donde más cae la probabilidad de supervivencia de un contrato indefinido entre el primer y segundo año.
Según el informe de CCOO, la reforma laboral ha recortado la supervivencia de los contratos indefinidos en casi todas las comunidades autónomas, que ahora es inferior a la que existía antes de la crisis.La probabilidad de que un nuevo contrato indefinido firmado siga activo a final de año en las estadísticas de empleo ha caído tras la reforma laboral. En 2007 esa probabilidad alcanzaba el 75% en todas las comunidades salvo Cataluña. En 2018 hay 12 comunidades donde no se alcanza el 75%, incluida Cataluña y Madrid. En todas las comunidades, salvo Navarra, ha empeorado la probabilidad de supervivencia a final de año de un nuevo contrato.
En 7 comunidades autónomas es necesario firmar al menos 2 contratos indefinidos para generar 1 empleo indefinido que al menos perviva entre 12 y 23 meses. Las comunidades donde mayor es la precariedad de la contratación indefinida y menor la supervivencia de estos contratos son: Baleares, Madrid, Cataluña, Murcia, País Vasco, La Rioja y Asturias.
Para la secretaria de Empleo de CCOO, Lola Santillana, estos datos ponen de manifiesto “los efectos perniciosos de la reforma laboral ejecutada por el Partido Popular que, tras aparentes formas más modernas de organizar las empresas e incentivar la contratación, esconden antiguas formas de explotación y abren la puerta a la descontrolada rotación laboral de la contratación indefinida y, en definitiva, al aumento de la precarización del trabajo” y, en consecuencia, la necesidad ineludible de derogar la reforma laboral.