Garzón exige el «cese inmediato» del fiscal anticorrupción y firma la iniciativa para que el Congreso repruebe al ministro Catalá «como máximo responsable político de lo que sucede»

El coordinador federal y portavoz parlamentario de Izquierda Unida en el Congreso, Alberto Garzón, ha exigido hoy el “cese inmediato” del fiscal jefe Anticorrupción, Manuel Moix, por su intento de “detener las investigaciones” de la denominada ‘Operación Lezo’, la trama de desfalco de dinero público del Canal de Isabel II por la que ha sido detenido el ex presidente de la Comunidad de Madrid Ignacio González.

Además, Garzón anunció una batería de iniciativas parlamentarias directamente relacionadas con esta ‘Operación Lezo’, impulsadas por IU y que a lo largo de hoy se registrarán en el Congreso con su firma a través del Grupo Parlamentario de Unidos Podemos, entre las que está que la Cámara Baja repruebe al ministro de Justicia, Rafael Catalá, porque ser “el máximo responsable en términos políticos de lo que está sucediendo en nuestro país, que no es cualquier cosa”.

Esta batería de iniciativas se completa con las peticiones urgentes de comparecencia en el Congreso del propio Catalá, así como del fiscal Manuel Moix y del fiscal general del Estado, José Manuel Maza.

Para el máximo responsable de IU, “el PP no ha trabajo en solitario para instalar redes de corrupción, sino que ha tenido cómplices necesarios en otras partes del Estado”. Explicó, en primer lugar, que “ha tenido cómplices, por lo visto, también en el ámbito de los medios de comunicación, en los que están imputados algunos periodistas conocidos por coacciones para que la ciudadanía no conociera la verdad de la corrupción del Partido Popular”.

“Pero, lo que es aún más grave -destacó-, hay también un conocimiento de que el fiscal Anticorrupción, nombrado por el fiscal general del Estado, cuyo deber es combatir la corrupción y trabajar sin cesar contra ella, maniobró para que no se conociese la información de la corrupción del PP, porque tenía una afinidad estrechísima con dirigentes de este partido en Madrid y el conjunto del Estado”.

Garzón se refería así a la noticia conocida hoy sobre esta misma trama corrupta y que apuntan a que las diligencias de investigación de la operación causaron una ‘rebelión’ de fiscales en el seno de la Fiscalía Anticorrupción, al oponerse Moix, con el respaldo del fiscal general del Estado, al criterio de los fiscales adscritos al caso para proceder a registrar el domicilio de Ignacio González. Los fiscales tuvieron que tirar de la ley que regula su trabajo convocar una Junta para que su superior permitiera que trabajaran en libertad.

“Creemos que esto es una noticia gravísima, que una institución del Estado como es la Fiscalía Anticorrupción tenga como representante a alguien que se dedica a favorecer al PP”, ha valorado el dirigente de IU.

“Por eso -resumió- y porque también sabemos que Ignacio González pudo saber que su teléfono estaba pinchado por la Guardia Civil porque se lo dijo un miembro del Gobierno de España y de Mariano Rajoy, anunciamos que vamos a registrar en las próximas horas cuatro iniciativas fundamentales: pedimos no sólo el cese inmediato del fiscal Anticorrupción nombrado por el fiscal general, porque es intolerable que esté un minuto más ostentando ese cargo. Vamos a pedir, al mismo tiempo, las comparecencias del ministro de Justicia, del fiscal general del Estado y del fiscal Anticorrupción. Pero también desde Izquierda Unida y Unidos Podemos vamos a pedir la reprobación del ministro de Justicia, que es el máximo responsable en términos políticos de lo que está sucediendo en nuestro país”.

Para Alberto Garzón, “la institución del Estado que debe perseguir la corrupción se ha dedicado a hacer favores al Partido Popular y protegerle de los casos de corrupción. Esto es gravísimo y en cualquier otro país sería un escándalo. Vamos a trabajar por defender la democracia y por seguir acusando al PP de utilizar las instituciones del Estado en su beneficio partidista”.

“Subrayo una cosa más -valoró ya en términos políticos-, si el PP es una enfermedad para la democracia y, en última instancia, una enfermedad para la convivencia social legítima entre ciudadanos que prefieren luchar contra la corrupción, tenemos que decir que hay que hacer todo lo posible para sacar a Mariano Rajoy del Gobierno”.

Del mismo modo, el coordinador federal de Izquierda Unida sentenció que “tenemos que criticar la hipocresía de partidos como Ciudadanos y el PSOE, que se llevan hoy las manos a la cabeza, pero que lo que hemos conocido no nos sorprende a ninguno. Partido Socialista y Ciudadanos son los responsables de que Mariano Rajoy esté ahora mismo en el Gobierno porque sus votos fueron necesarios para que esté ahora mismo gobernando como presidente”.