CCOO exige medidas urgentes para solucionar la grave crisis migratoria que afecta a Canarias

La secretaria confederal de Empleo de CCOO, Lola Santillana, ha visitado Gran Canaria para conocer la situación de miles de personas migrantes que sobreviven en el muelle de Arguineguín, donde existe una grave crisis migratoria y de atención humanitaria. Estas últimas semanas están poniendo a prueba la capacidad de respuesta del Gobierno para ordenar y gestionar la llegada de los flujos migratorios, brindando ayuda humanitaria a niñas, niños, mujeres y hombres y garantizando el acceso a los servicios básicos.

En su visita, Santillana ha podido comprobar las carencias que sufren estas personas migrantes a diario: hacinamiento, falta de salubridad, falta de agua suficiente y de atención médica, ausencia de información acerca de sus derechos, sin asistencia jurídica, tutela judicial efectiva, etc. Es por ello que la responsable confederal advierte que el Gobierno está obligado a facilitar a las personas migrantes un trato humanitario acorde con un Estado democrático, social y de derecho. “El reciente reconocimiento por parte de la autoridad policial en Gran Canaria sobre la descoordinación respecto a la situación de los cientos de personas hacinadas en Arguineguín, es un paso más en la constatación de una situación que debería avergonzar a todo el país y que no debería continuar ni un minuto más”, afirma Santillana.

Respecto al plan que proporciona 7.000 plazas de alojamiento en carpas presentado por el Gobierno este viernes, en opinión de CCOO esta oferta llega demasiado tarde pues “el Gobierno debería haber actuado hace más de un mes, cuando las cifras de llegadas de personas superaron la centena diaria”. Además, este alojamiento debe garantizar el respeto a los derechos humanos básicos y unas condiciones de vida digna, lo que no parece muy probable tratándose de carpas. Hay que tener presente que muchas de estas personas llegan huyendo de conflictos en sus países y temen por su vida y la de los suyos. “Debemos asegurarles una acogida que incluya asistencia humanitaria, jurídica, asistencial, etc.” explica Santillana.

Por otra parte, CCOO viene reclamando una política migratoria para la UE y para nuestro país que ponga en el centro a las personas migrantes y sus diversas situaciones. Es precisa también la ordenación de los flujos migratorios, por medio de una política consensuada que evite las aglomeraciones y hacinamientos inhumanos, y combata la proliferación de los mensajes xenófobos y racistas alentados por la extrema derecha, “que aprovecha las situaciones de dificultad y la falta de actuación gubernamental para alentar la demagogia en sus discursos racistas».

De la misma manera, el sindicato incide en que hay que tener presente a las plantillas de trabajadoras y trabajadores de los establecimientos turísticos en que han sido alojados provisionalmente cientos de personas. Estas personas trabajadoras no son suficientes para la atención a las personas migrantes, que nada tiene que ver con la atención hotelera enfocada al turismo. Esto se debe llevar a cabo en los dispositivos de atención. Así ha quedado patente en la entrevista que el secretario general de la Federación de Servicios canaria y la secretaria confederal de CCOO han mantenido con el presidente de la Federación de Empresarios de Hostelería y Turismo de Las Palmas.

CCOO exige al Gobierno la adopción de medidas y la habilitación de mecanismos inmediatos para el traslado a la Península de estas personas, que eviten la degradación de la situación en Gran Canaria: se da la circunstancia de que en torno al 50-60% de los dispositivos de acogida en la Península están operativos y disponibles, por lo que pueden alojar a estas personas.

El sindicato denuncia la clara intención del Ministerio del Interior de convertir a las Islas Canarias en una válvula de control de flujos migratorios con destino a la Península, como ya ha venido haciendo con Ceuta y Melilla. El Ministerio del Interior acusa una restrictiva visión cuando prima un enfoque exclusivo de control de las migraciones e impide su correcta gestión, que es y debería ser mucho más que el tratamiento policial y la restricción de movimientos y derechos de las personas migrantes.

CCOO llama nuevamente a la responsabilidad del Ministerio del Interior, al Ministerio de Seguridad Social, Inclusión y Migraciones y a todo el Gobierno de España, para asistir dignamente a estas personas y evitar la propagación de los discursos de la extrema derecha que juegan a envenenar la convivencia plural, respetuosa y democrática.