Piden que la regulación de la caza al salto tenga garantías de seguridad y sanitarias
Esta mañana se ha reunido por videoconferencia el grupo de trabajo para la reforma del reglamento de la ley de caza donde ha analizado y realizado aportaciones a un borrador de propuesta de reglamentación de la caza al salto, a ella ha asistido un representante de las asociaciones relacionadas con la defensa de la naturaleza de Extremadura en el Consejo Extremeño de caza.
En relación al proyecto de orden de la caza al salto recibida el 18 de Diciembre de 2020 el representante ha hecho las siguientes observaciones y ha transmitido su preocupación por algunos aspectos de la propuesta.
La modalidad de jabalí al salto empleando cartucho bala que se propone afirman las ongs que es un peligro para cualquier persona que pase por un camino público, permanezca en terrenos rústicos o para los propios cazadores que disparen una bala en dirección a un compañero que seguramente estará a poca distancia. Por ese motivo creen que se deben extremar las precauciones y tal como ya pidieron reiteran que se debe actuar con ellas como con cualquier otra acción de caza mayor, obligando a señalizarlas en los accesos practicables, con aviso previo a propietarios de las parcelas donde se desarrolle y con autorización, para además facilitar la supervisión por parte de los agentes de medio natural y del SEPRONA, así como de las autoridades sanitarias.
Entienden que estas acciones deben tener un estricto control sanitario y debe firmarse un acta de resultados, especialmente importante para evitar el abandono de cadáveres que puedan tener patologías como la tuberculosis, porque en caso contrario este tipo de caza puede provocar el aumento de casos de enfermedades que los jabalíes puedan contraer, al consumir los cadáveres de sus congéneres muertos. Afirman que los animales visiblemente enfermos pueden ser abandonados por algunos cazadores irresponsables, conocedores de que les costaría dinero y tiempo sin poder aprovecharlo, por lo que creen conveniente que la tasa de recogida de cadáveres se abone antes.
Muestran su desacuerdo con que en zonas concretas de Extremadura VC3 se autoricen batidas con el nombre de caza al salto, esto avisan de que crea confusión y creen que en todo caso este tipos de acciones deben estar encuadradas en las batidas ya reglamentadas.
En cuanto al artículo 5 apartado 2 que establece esta práctica de caza en cotos sociales piden que también se excluya aquellas zonas ubicadas a menos de 500 metros de viviendas por el peligro de accidentes con consecuencias mortales, muchas de estas viviendas en medio rural están incluidas en cotos sociales.
Las ongs recuerdan que han pedido que se reglamente mejor para evitar la situación de inclusión de fincas privadas sin autorización de sus propietarios, que se ha hecho en muchos casos con una simple declaración responsable expuesta en los tablones de anuncios de Ayuntamientos, pero que para segregarlas conlleva un proceso mucho más laborioso que precisa entregar escrituras, planos y pagar una tasa, todo ello les parece improcedente si el propietario no autorizó esta inclusión en el coto y piden que esto se corrija por poder contravenir diversas legislaciones y el respeto a la propiedad privada. Según se ha indicado desde la Consejería estos aspectos se verán en una próxima reunión.
Desde estas organizaciones quieren hacer ver que en una país en el que este año ya han fallecido unas 70 personas por disparo con arma de fuego en acción cinegética, estando Extremadura a la cabeza en número de fallecidos per cápita, en esta situación actual de siniestralidad reglamentar esta actividad de caza al salto sin las debidas garantías, de señalización y previo aviso a propietarios, les parecería una imprudencia temeraria por parte de las autoridades.
Por otra parte también consideran que si tal y como se propone en el texto se dieran estas autorizaciones genéricas de caza al salto, sin autorización previa, podrían dar pie a la caza furtiva de otras especies de caza mayor como ciervos o corzos y dificultar la labor de control por parte de los Agentes de Medio Natural y del SEPRONA.
Por todo ello esperan que se revise la propuesta y se incluyan sus peticiones.
La representación de las ongs ambientales fue nombrada por votación entre las Asociaciones ADENEX, AMUS, ANSER, DEMA, ECOLOGISTAS EN ACCIÓN EXTREMADURA, ECOLOGISTAS EXTREMADURA, GRUS, SEO/BIRDLIFE Y SOCIEDAD EXTREMEÑA DE ZOOLOGÍA.