PACMA condena las imágenes de un niño torero con la cara desfigurada tras una novillada
- Las fotografías se tomaron este fin de semana durante la Feria de Santander.
Madrid, 22 de julio de 2024 – El Partido Con el Medio Ambiente, PACMA, ha expresado durante la mañana de este lunes su más rotunda condena ante la reciente imagen del torero de 17 años Marco Pérez, con el rostro ensangrentado y desfigurado tras matar a un novillo durante la Feria de Santander este fin de semana. «Esta imagen, en la que el joven alza un estoque, pone de manifiesto la brutalidad y el peligro físico y psicológico de permitir que menores participen en actividades taurinas», explican.
«Es inconcebible que se permita a los niños involucrarse en la tauromaquia, una actividad que ningún niño normal emprendería de forma consciente. Los niños tienen el instinto natural de querer jugar con los animales, no de matarlos conscientemente. Sin embargo, cuando se les acostumbra desde pequeños a la violencia, a la sangre, a los gritos y a perder la empatía natural hacia otros seres vivos, el resultado es devastador: adolescentes con la mirada perdida, sosteniendo estoques ensangrentados, tratados como héroes por masacrar animales en uno de los pocos países del mundo que aún lo permiten», declara la portavoz de PACMA, Yolanda Morales.
¿Qué ser humano saldrá de esta crianza? ¿Con qué valores? ¿Con qué objetivos?
— PACMA (@PartidoPACMA) July 22, 2024
La tauromaquia es una actividad buena para nada, pero en el caso de los niños, como este torero de 17 años que ya ha asumido que la violencia es normal, es un lastre emocional que tendrán que soportar… pic.twitter.com/k2COae2plB
Para Javier Luna, el presidente nacional del partido, este episodio no debería ser visto como una «hazaña» sino como una «muestra de la barbarie que, lamentablemente, aún persiste en nuestra sociedad».
PACMA critica que el gobierno subvencione y fomente estas actividades en lugar de cumplir con la Convención de Derechos del Niño que ratificó ante la ONU y que insta al país a alejar a los niños de la violencia, y lamenta profundamente que «ni los gobiernos de izquierdas ni de derechas tomen medidas para erradicar la tauromaquia».
«Permitir que los niños participen en la tauromaquia puede tener consecuencias psicológicas graves y duraderas para ellos. Es una irresponsabilidad por parte de los gobiernos seguir permitiendo y promoviendo esta práctica», concluye Luna.