“Nos echan, no nos callan”: la Comunidad de Madrid desaloja a Radio Vallekas por no poder pagar un alquiler de 1.400 euros
Según dicta una sentencia judicial motivada por una denuncia de la Agencia de Vivienda Social, propietaria del local, el próximo 1 de marzo la policía procederá al desalojo de Radio Vallekas de su actual ubicación, calle Puerto del Milagro 6 Posterior. “Nos echan, no nos callan” replica nuestra histórica radio comunitaria que, incapaz de asumir un alquiler de 1.400 euros mensuales, se traslada al centro social La Villana.
Tal y como relata la asociación que gestiona la radio en un comunicado, “la sentencia se produce tras la denuncia de la Agencia de Vivienda Social (AVS, antiguo IVIMA), debido a que la asociación que desarrolla la labor comunicativa dejó de pagar un alquiler abusivo de 1.400 euros mensuales en 2010. Actualmente, la AVS nos reclama a una asociación sin ánimo de lucro casi 200.000 euros en alquileres atrasados y nos desaloja del espacio donde desarrollamos nuestra labor, sin darnos otra opción. ¡Nos echan, pero no nos callan! No podemos resistir el desalojo, pero nos llevamos la radio a La Villana de Vallekas, a cuyas socias agradecemos habernos acogido. Las condiciones van a ser mucho más difíciles, ya que no dispondremos de todos nuestros equipos ni estudios, pero continuaremos haciendo programas y emitiendo”, asegura la entidad, que forma parte de la FRAVM y cuenta con todo su apoyo.
¿Qué era Radio Vallekas en 2010?
Para entender los motivos que la han llevado a esta difícil situación hay que conocer que el funcionamiento de la radio cambió radicalmente debido a la crisis de 2008. En aquellos años RVK recibía varias subvenciones para desarrollar proyectos de comunicación social, tenía varias personas empleadas y podía pagar sin problemas los gastos de alquiler. Debido a la crisis se cancelaron las subvenciones a los medios comunitarios de Madrid, por lo que RVK se quedó sin ingresos.
Quizá hay quien recuerde de aquella época el lema “RVK es una ballena y nos quieren arponear” que se sacó para exponer la situación.
Desde aquel momento, la AVS no se ha prestado a negociar un alquiler imposible de pagar para una entidad como RVK ni tampoco ha ofrecido ninguna alternativa para seguir desarrollando sus actividades, subraya la radio libre. En 2010 se aprobó la Ley General de Comunicación Audiovisual (Ley 7/2010) que en su artículo 32 reconocía por primera vez la existencia de los medios comunitarios así como su papel social. Además, señalaba que las administraciones públicas locales y regionales deberían garantizar un espacio y licencias de emisión para ellos. “Sabemos de sobra cómo opera la especulación inmobiliaria en esta ciudad, donde se suceden desahucios a familias y desalojos a centros sociales, pero hay miles de inmuebles vacíos, con el objetivo de inflar los precios” sostiene la radio.
¿Qué es RVK ahora?
Según sus propias palabras “seguimos siendo una asociación sin ánimo de lucro. La radio sobrevive gracias a las aportaciones de las socias que llevan a cabo los programas. Con estas aportaciones apenas da para pagar el mantenimiento de los equipos, la luz, Internet y los gastos de comunidad del edificio. Tenemos alrededor de 30 programas en la parrilla. Todas las decisiones trascendentales de la radio se toman de forma asamblearia entre las socias que son quienes, durante todos estos años, ante la falta de alternativas, han decidido seguir desarrollando la labor comunitaria y comunicativa en el espacio en el que estaba la radio. No somos una empresa. Teníamos y tenemos una labor social que cumplir y hemos elegido seguir haciéndola mientras ha sido posible”.
No en vano, en la radio se desarrollan programas con personas de los Centros de Rehabilitación Psicosocial (un campo en el que la radio ha demostrado ser una ayuda crucial), programas con jóvenes en riesgo de exclusión, programas conducidos por los profesionales de los Centros de Salud Comunitarios del barrio o programas realizados por personas mayores. Mensajes radiofónicos que no tendrían hueco en una emisora comercial.
Además, el espacio del local se ha cedido, siempre que lo han solicitado, a colectivos y grupos que lo necesitaran para labores comunitarias, educativas o sociales aunque nada tuvieran que ver con la expresión radiofónica.
Por eso, “ante este ataque, no sacamos este comunicado para hacernos las víctimas. Queremos contar lo que pasa y pedir que os unáis a la radio, la radio crece cuantas más personas vienen a hacer programas y a participar en ella. Necesitamos fuerza para esta nueva etapa y para nosotras la fuerza se mide en la cantidad de voces que asaltan las ondas a través de nuestros micros”, indica.
En el texto, la radio subraya que “la entrada de la extrema derecha a las instituciones madrileñas no ha sido gratuita”. “Desde que ocupan cargos y sillas-asegura-, los movimientos vecinales, autogestionados y comunitarios se están viendo perseguidos y asfixiados. Lo estamos viendo con el EVA de Arganzuela, con solares abandonados revividos por los vecinos que cierran. La FRAVM nos cuenta que les están retirando locales. No es nada oculto. Vox entró al Ayuntamiento declarando literalmente la guerra a la FRAVM y a cualquier asociacionismo vecinal y comunitario, así lo sentenció Ortega Smith el 15 de noviembre de 2019. Por eso sabemos que no es casualidad que nuestro desalojo llegue ahora. Y más que nunca sabemos que esta radio con 35 años de historia tiene que vivir y resistir para lanzar a las ondas y por Internet las voces de quienes habitan Vallecas”.
¡Larga vida a Radio Vallekas!