Podemos Andalucía pide nuevos mecanismos públicos que garanticen las necesidades materiales de la ciudadanía
Hoy ha concluido la primera jornada programática de esta formación en la que se han abordado debates sobre renta básica, rentas mínimas y trabajo garantizado con personas expertas de toda España. Las conclusiones del debate se trasladarán a todos los órganos de Podemos Andalucía para recoger aportaciones y elaborar un posicionamiento final que será votado por inscritos e inscritas.
Las I Jornadas Programáticas de Podemos Andalucía relativas a renta básica, rentas mínimas y trabajo garantizado han concluido hoy en Sevilla tras dos sesiones de debate en las que han participado personas expertas de toda España junto a cargos orgánicos, institucionales y militantes de Podemos Andalucía así como activistas de movimientos sociales. Según ha explicado la responsable del Área de Economía y Hacienda de Podemos, Carmen Lizárraga, “hemos cerrado este primer debate con el convencimiento de que debemos recoger en nuestro programa electoral mecanismos públicos innovadores para garantizar unas condiciones materiales dignas a todos los andaluces y reactivar la economía”, toda vez que “las políticas aplicadas por PP y PSOE desde sus respectivos gobiernos han favorecido el incremento de la pobreza en Andalucía”.
Fruto de las dos últimas reformas laborales y la globalización económica, el empleo remunerado ha dejado de dar respuesta en Andalucía a la garantía de la existencia material de toda la población: además de las altas tasas de desempleo, el empleo remunerado se caracteriza hoy por su precariedad, temporalidad y salarios a la baja; una parte importante de los autónomos tienen condiciones muy duras para salir adelante. Lo que en la práctica supone el crecimiento de desigualdades sociales, el aumento del número de familias sin ingresos y la aparición de nuevas figuras como el “trabajador pobre” o los “falsos autónomos”. En este sentido, los participantes de las jornadas han abogado por una salida que garantice la existencia material de la población alejada de la lucha entre “los últimos y los penúltimos”, una perspectiva utilizada por dirigentes neoliberales como Le Pen o o Trump para enfrentar a los pueblos. Por el contrario, se apuesta por opciones políticas inclusivas e incluyentes, donde la existencia material de la población sea un nuevo derecho.
En este contexto, las rentas mínimas de inserción –según lo expuesto en las jornadas- se ha mostrado ineficaces para acabar con la desigualdad social y se hace necesario avanzar hacia nuevas fórmulas que ofrezcan una solución definitiva a la situación de emergencia material que vive la comunidad autónoma, como apuntaba el último informe del Defensor del Pueblo. El caso de Andalucía –que cuenta con un ingreso mínimo de solidaridad- es paradigmático de la insuficiencia de estas medidas: el Gobierno destina 90,6 millones de euros en los presupuestos de 2017 para 106.000 personas beneficiarias (1,28 de la población); por el contrario, el Gobierno de Euskadi destina 507 millones de euros para 100.000 beneficiarios, lo que supone un gasto cinco veces superior para una población cuatro veces inferior y un subsidio per cápita tres veces más alto que en Andalucía, que, todo hay que decirlo, está siendo recortado en estos momentos.
La Renta Básica (universal, incondicional, suficiente e individual) ha sido objeto de gran debate en las jornadas, donde se ha destacado su potencial como herramienta social transformadora que requeriría, para implementarse cambios fiscales que beneficiaría al 80% de la población andaluza. El cambio producido generaría además un positivo impacto social y económico para toda la población, si bien su puesta en marcha necesita ir acompañada de políticas que garanticen el mantenimiento de los servicios públicos. El trabajo garantizado, que podría ser compatible con la renta básica, ha sido el tercer mecanismo de garantía de la existencia material debatido en las jornadas, e implicaría garantizar un empleo público de calidad a la ciudadanía con el objeto de lograr mejores cotas de bienestar social y acabar con la precariedad en sectores socialmente útiles.
Proceso participativo
Las jornadas sobre renta básica, a las que seguirán otras de carácter provincial, constituyen la primera acción de Podemos Andalucía dentro de su calendario para la elaboración de un programa electoral autonómico participativo. Así, las conclusiones emanadas de estos encuentros se recogerán en un informe que, posteriormente, se trasladará a círculos y consejos ciudadanos municipales para su debate y recogida de aportaciones. El dictamen final será elaborado por el Consejo Ciudadano Andaluz y sometido a votación de todos los inscritos en esta formación, lo que supondrá su aval definitivo para incluirlo en el programa electoral con el que Podemos concurrirá a las próximas elecciones autonómicas.