CCOO manifiesta su solidaridad con los detenidos de Alcoa y pide que se archive el caso

La central sindical Comisiones Obreras (CCOO) ha brindado una rueda de prensa esta mañana para solidarizarse con los trabajadores de Alcoa procesados por la concentración frente al Congreso de los Diputado el pasado 28 de abril, en las movilizaciones convocadas contra el cierre de los centro de producción en Galicia y Asturias.

El secretario general de CCOO Unai Sordo ha querido dejar claro que la convocatoria que tuvo lugar aquel día frente a la sede de la Cámara Baja “nunca fue más que un ejercicio de libertad sindical y del derecho a manifestarse”. “Rechazamos cualquier tipo de imputación en una jornada en la que se produjeron las tensiones propias de estos actos, pero en la que no hubo ningún tipo de ejercicio de violencia”, ha añadido.

Desde el sindicato consideran totalmente improcedente la causa abierta, apuntando que aquel día “los manifestantes tuvieron una actitud impecable y cívica”.

Por estos motivos, desde la central sindical exigen el archivo inmediato de toda la causa contra los trabajadores y sindicalistas, así como los tres diputados de Unidas Podemos que han sido citados como imputados por el juzgado de instrucción número 25 de Madrid.

En el mismo sentido se ha manifestado Agustín Martín, Secretario General de CCOO de Industria. “Denunciamos los fallos en el propio dispositivo policial de ese día”, ha apuntado. “En esta movilización no hubo ninguna violencia, en todo caso hubo una ineptitud por parte del dispositivo policial que se trata de cubrir con un atestado que, por calificarlo de manera suave, diría que fue malintencionado”, ha afirmado Martín.

Desde CCOO no se han limitado a pedir el archivo del caso y han aprovechado para señalar que la causa es una muestra de una serie de legislaciones lesivas para el derecho a la actividad sindical, exigiendo modificaciones legales. Según el secretario general de la central sindical, “parte de los problemas que estamos teniendo vienen de que durante determinados años hubo una interpretación neoautoritaria (del derecho)”, apuntando a la Ley Mordaza y al artículo 315.3 del Código Penal como trabas deliberadas a la actividad sindical.