Ramón Espinar pregunta a Mariano Rajoy por la viabilidad del actual sistema de pensiones en la Sesión de Control al Gobierno del Senado

La reforma que realizó en 2011 el PSOE para subir la edad de jubilación de 65 a 67 años y la desvinculación del IPC para introducir el factor de “sostenibilidad” que incorporó en 2013 el PP no han mejorado la situación. Más bien al contrario. Ninguna de estas dos medidas han servido para revertir una situación límite y, de continuar con esta dinámica, las pensiones se verán reducidas a partir de 2019. En consecuencia, cuanto más vivamos, menos renta percibiremos.

Estas medidas se han limitado a recortar las pensiones como única vía de garantía de la sostenibilidad. Pero el sistema no es capaz de crear mecanismos para aumentar los recursos para financiar las pensiones. Además, según datos del INE, los salarios reales se han reducido un 3,7% desde 2007. En 2015, la base de cotización ha aumentado un 3,5% mientras que los ingresos sólo han ascendido un 2,6%. Es decir, actualmente hay incluso más gente trabajando que en 2011, pero el Estado recauda menos.

La única solución viable, por la que apostamos desde el Grupo del Cambio, pasa por aumentar los ingresos por cotizaciones en los salarios que percibe la población, además de la incorporación progresiva de los desempleados a puestos de trabajo estables que garanticen la estabilidad del sistema. Sin embargo, la precariedad, la reducción de los salarios y la alta temporalidad de los empleos apenas suponen una fuente de recaudación estable. “Ustedes no crean empleo, sino que reparten precariedad” ha sentenciado hoy Ramón Espinar durante su intervención en el Pleno. Y es que actualmente, 17 millones de trabajadores en activo soportan la carga de las pensiones del total de la población.

Por eso, el Grupo Parlamentario de Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea consideramos preciso volver a ligar el salario y las pensiones a la inflación, fomentar la creación de empleo estable y aumentar las cotizaciones de las rentas más altas, que son las que más han crecido desde que comenzó la crisis. De igual manera, las pensiones inferiores a 1.000 euros han acumulado entre 2011 y 2014 una pérdida de poder adquisitivo de 3,65 puntos, mientras que las superiores a esta cantidad han perdido 4,65 puntos de capacidad de compra en el mismo periodo.

Además, proponemos que los Presupuestos Generales del Estado incluyan una partida que garantice la financiación de las pensiones. Rajoy ha acabado con el 54% del Fondo de Reserva, que ha pasado de contar con 71.000 a 25.167 millones de euros. De seguir así, y pese a las palabras de Fátima Báñez de hoy, el fondo podría agotarse en 2018, incluso antes de que se comiencen a jubilar los hijos del ‘baby boom’ para quienes se creó la conocida «hucha de las pensiones». No se trata de alarmismo, sino de un análisis crítico y real de la situación.

Mientras, la Ministra en el nuevo Gobierno ya nos lo ha advertido esta misma mañana: Cuando nos jubilemos, podremos seguir trabajando y percibir el 100% de la pensión que nos corresponda. Rajoy, en su réplica, se ha equivocado cuando ha afirmado que la medida ya está en vigor pese a que se trata de un anuncio realizado apenas unas horas antes. Quizás lo que no ha querido explicar es que puede que esa pensión sea tan exigua que no nos quede más remedio que seguir en activo para poder subsistir.

“Nosotros, señor Rajoy, tenemos un modelo de país diferente al suyo. En nuestro modelo de país la democracia tiene que ir acompañada de servicios sociales y no se entiende sin derechos de ciudadanía. Nosotros vamos a defender un país en color frente al modelo en blanco y negro de la justicia y la precarización de las condiciones de vida de los españoles”, ha concluido Ramón Espinar en su intervención en la sesión de Control del Gobierno realizada hoy en la Cámara Alta.