Redacción •  Actualidad •  23/12/2019

Ideas para unas fiestas sostenibles y solidarias

Ecologistas en Acción desea unas felices fiestas e invita a poner en práctica varias ideas para celebrar estos días de manera agradable y sostenible.

Ideas para unas fiestas sostenibles y solidarias

La celebración de las fiestas navideñas es un gran momento para descansar y disfrutar en soledad o en buena compañía. Sin embargo estas fiestas van muchas veces asociadas a digestiones pesadas, cuentas en números rojos y unos cuantos regalos que no sabemos dónde meter. El derroche de comida, de energía, de compras inútiles se ha instalado como hábito al final de cada año. Pero hay alternativas que nos ahorran dinero y disgustos y que también sientan mejor al planeta y al resto de sociedades y territorios.

Conscientes de que el consumo supone –de manera directa o indirecta– más del 60 % de las emisiones de gases de efecto invernadero y un 80 % del consumo de agua y tierra a nivel global, Ecologistas en Acción ha preparado quince ideas para celebrar las Navidades de manera más sostenible y solidaria. Unas recomendaciones que además sirven para el resto del año.

1. Reduce todo lo que puedas aquello que sean mercancías, servicios, productos y energía. 

2. Aumenta aquello que no tiene huella ecológica pero sí revierte en tu bienestar: tiempo para el encuentro, para los paseos por la naturaleza, para los juegos de mesa, para la lectura reposada, para el silencio, la relación…

3. Come cosas ricas y recupera costumbres. Estas fiestas podrían ser un buen momento para apostar por productos locales y tradicionales, como el cardo de navidad o la lombarda con manzanas. Una oportunidad para sacar de tu plato alimentos con un gran impacto ambiental y social, como los langostinos tropicales

4. Reduce el consumo de carne y pescado. Si decides adornar tus cenas con productos de origen animal, recuerda nuestra campaña Stop Ganadería Industrial y apuesta por carne procedente de ganadería extensiva y de cercanía. En el caso del pescado, te recordamos que mirando la etiqueta puedes obtener mucha información que te haga elegir un producto procedente de un arte de pesca tradicional con bajo impacto. 

5. Si regalas ropa, ten presente que el sector textil es la segunda industria más contaminante y que cada año se fabrican 100 mil millones de nuevas prendas de ropa en todo el mundo generando un impacto medioambiental y social lejos de ser sostenible. Puedes regalar ropa de segunda mano, de trueque, de la economía social y solidaria o de comercio justo. 

6. Si regalas tecnología, intenta evitar la obsolescencia programada. Por poner un ejemplo, en un año se venden 1.500 millones de teléfonos inteligentes, según datos del Fondo Monetario Internacional (FMI) de 2016. Y la vida media de un smartphone es de 20 meses. Antes de regalar tecnología nueva, puedes intentar arreglarla, reutilizarla, hacer trueque.

7. Si estás en contacto con niñas o niños, puedes proponerles que reduzcan su carta a los Reyes Magos, que seleccionen aquello que más les gusta. También que hagan trueque, que intercambien, que pidan cosas que no sean objetos y que sean creativas. 

También puedes hacerles un regalo no consumista, como regalarles la suscripción a Gallipata, la revista infantil de Ecologistas en Acción.

8. Ve al circo, porque es un espectáculo de magia y alegría. Un espacio en el que caben trapecistas, payasos, contorsionistas, pero no el maltrato de animales.

9. No regales mascotas. Los animales no son juguetes.

10. Regala tiempo, emociones y buenas ideas, cosas hechas a mano, productos de cooperativas o mercados de trueque, libros… No te dejes convencer de que las muestras de cariño tienen precio y salen en los anuncios.

11. Decora e ilumina tu casa, si te gusta, pero hazlo con originalidad y sensatez. Los árboles no han perdido nada en el salón de tu casa. Y las luces brillan mejor si se usan con moderación.

12. Las Navidades suponen un aumento de residuos de todo tipo. Intenta reducir, evita el despilfarro de comida y lleva a puntos limpio los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE).

13. Asóciate a proyectos colectivos llenos de ilusión, que necesitan de tu apoyo para salir adelante y demostrar que sí es posible crear alternativas, como las del mercado social, o a organizaciones ecologistas.

14. Sigue denunciando ataques a la naturaleza y a los derechos de las personas, así como trabajando por un mundo más sostenible y justo. Para ponerte al día puedes seguir las campañas de Ecologistas en Acción. 

15. Sobre todo, intenta ser feliz y prepárate para un nuevo año con energías renovadas y renovables.

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Durante todo el año, y especialmente en fechas señaladas como las fiestas navideñas, los ciudadanos y ciudadanas se lanzan a las calles a comprar, atendiendo a los mensajes lanzados por unas campañas publicitarias que comienzan con más de un mes de antelación del inicio de las fiestas.

Pero este consumismo sin sentido promueve un modelo insostenible ambiental y socialmente. Ambientalmente porque si el modelo de consumo de los países del norte se extendiera por todo el mundo, serían necesarios 3 planetas (con sus materias primas, fuentes energéticas…) para atender la demanda. Y socialmente porque sólo un 12 % de la gente que vive en Norteamérica y Europa occidental es responsable del 60 % de ese consumo, mientras que los que viven en el sudeste asiático o en el África subsahariana representan sólo un 3,2 %.

Por eso Ecologistas en Acción quiere proponer una serie de alternativas para celebrar estas fiestas de un modo más sostenible, sin olvidar que el mensaje principal que la asociación ecologista quiere poner de manifiesto es que es imprescindible una reducción en el consumo si se quiere poner freno al deterioro ambiental y social.


Consejos antes de comprar un regalo

Antes de comprar un regalo, reflexiona…

  • Lo primero que hay que hacer antes de comprar algo es reflexionar sobre si realmente se necesita.
  • Una vez que se ha decidido adquirir el producto, es muy importante intentar averiguar cómo ha sido fabricado, si en su proceso de producción se ha perjudicado al medio ambiente o a algún ser humano.
  • También hay que pensar cómo repercute su utilización en el medio ambiente.
  • Es importante tener en cuenta que siempre va a ser más sostenible comprar aquello que hayan sido producido lo más localmente posible.

Ahorro energético

Ya nadie duda de que el uso energético está produciendo graves problemas ambientales. Se puede ahorrar energía poniendo en práctica los siguientes consejos:

  • Reducir al máximo la utilización del coche y usar el transporte colectivo (el coche se utiliza, en la mayoría de los casos, para trayectos que se podrían realizar a pie en menos de tres cuartos de hora).
  • Reducir la compra de productos superfluos e innecesarios, pues para su fabricación hace falta energía.
  • Conectar los aparatos a la red en vez de que usar pilas.
  • Desconectar los aparatos eléctricos cuando no estén funcionando.
  • Utilizar electrodomésticos eficientes y prescindir de aquellos que sean innecesarios (para abrir una lata o cepillarse los dientes no hace falta un aparato eléctrico).
  • La temperatura de la vivienda debe mantenerse acorde con la época del año (no es necesario llevar un jersey en verano y manga corta en invierno).
  • Usar bombillas de bajo consumo.
  • Consumir productos locales es otra manera de ahorrar energía, toda aquella que se emplea en su traslado.

Disminución de los residuos

Los envases y embalajes son un problema serio para el medio ambiente. Un 40 % de la basura doméstica son residuos orgánicos, del resto, un 80 % lo constituyen envases. Este porcentaje crece sin cesar y se dispara en Navidad.Para fabricarlos se destruyen recursos naturales, se contamina el agua y la atmósfera. Tanto en su fabricación como en su reciclaje se consumen grandes cantidades de energía y cuando se convierten en residuos tienen un notable impacto ambiental, tanto si se depositan en vertederos como, sobre todo, si se incineran.

Mientras que el resto del año cada persona genera un kilo y medio de basuras al día (hace 30 años no se llegaba ni a medio kilo), en estas fechas son dos kilos; y la mitad son envoltorios y embalajes.

Se puede reducir la cantidad de residuos generados poniendo en práctica los siguientes consejos:

  • Cada vez que se compre algo es importante pensar cuántos residuos genera aquello que consumimos.
  • Evitar los productos de “usar y tirar”.
  • Rechazar las bolsas de plástico que dan en los comercios y llevar bolsas de tela o el clásico carrito de la compra.
  • Hacer un ejercicio de imaginación, muchas de las cosas que se tiran a la basura se pueden reparar, reutilizar o reciclar.
  • Evitar las latas, y rechazar los alimentos con muchos envases. Las fiambreras o los tarros de cristal son una alternativa mucho más saludable y ecológica para guardar los alimentos que tapándolos con plástico o aluminio.
  • Comprar el contenido y no el envase. Muchas veces se paga más por los envoltorios que se tiran directamente a la basura que por el contenido.
  • Elegir productos con envases retornables o reutilizables.
  • Evitar utilizar productos de limpieza que se han venido utilizando tradicionalmente, como la lejía o el amoniaco, que aparte de producir residuos tóxicos son perjudiciales para la salud. El jabón, el vinagre o el limón son alternativas más ecológicas e igual de eficaces en la limpieza.
  • Al recibir regalos, no tirar el papel, se puede guardar para otras ocasiones.
  • En Navidad se reciben muchas tarjetas de felicitación, en vez de tirarlas se pueden reutilizar.
  • Reciclar un regalo que ya se tenga en casa.

Ahorro de agua

El agua limpia es un recurso cada vez más escaso y, a pesar de que es esencial para la vida, se malgasta, derrocha y contamina a un ritmo vertiginoso. A continuación se proponen una serie de consejos para ahorrar agua:

  • Colocar dispositivos de ahorro de agua en los grifos.
  • Meter botellas en las cisternas de modo que al tirar de la cadena el volumen de agua que salga sea menor.
  • Disminuir el consumo lo máximo posible (ducharse en vez de bañarse, cerrar el grifo cuando no sea necesario, recoger el agua fría que sale de la ducha hasta que se pone caliente…)
  • No jugar a deportes que contribuyan al despilfarro de agua, como el golf.

Alimentación más ecológica y saludable

Cuando cada año se incrementa el número de personas desnutridas en cuatro millones (según la FAO), en estas fechas se tiran hasta un 40 % de los alimentos producidos, debido a descartes por exigencias estéticas del mercado, los fallos en la distribución de tan grandes volúmenes, etcétera. Por eso es importante tener en cuenta los siguientes consejos:


Unos regalos navideños diferentes

En Navidad, los mensajes publicitarios van empapados se sentimientos entrañables en defensa de valores familiares y de elogio de la solidaridad. Sin embargo, la canalización de todos estos sentimientos va siempre encaminada a la consecución de un claro objetivo: incrementar las ventas bajo un asumido despilfarro navideño, sin tener en cuenta sus repercusiones sociales y ambientales.

Por ello proponemos que en vez de dedicar tiempo a estar en interminables colas en centros comerciales, se dedique ese tiempo a pensar en unos regalos diferentes. Y que se sea crítico con la publicidad y no creamos ciegamente los sueños que nos vende.

Echar la vista atrás para ver que, no hace tanto tiempo, éramos felices celebrando la navidad de otro modo, puede ayudar a ver que hay otros modelos diferentes al consumo desenfrenado.

En los juguetes

El bombardeo publicitario que empieza más de un mes antes de que llegue la navidad no olvida a los más pequeños de la casa, y crea para ellos un montón de anuncios de juguetes. Según la Asociación Española de Fabricantes de Juguetes (AEFJ) en estas fechas se compran el 75 % de los juguetes que se venden cada año.

Muchos padres y madres, sometidos a la presión de sus hijos e hijas, acaban por convencerse de que para demostrar lo mucho que les quieren les tienen que comprar más regalos, y terminan sometiéndose a la dictadura de la publicidad olvidando alternativas de consumo más justas social y ambientalmente. Aquí mostramos algunas de ellas:

  • Buscar juguetes de artesanía local.
  • No comprar juguetes sobre embalados.
  • Asegurar que son juguetes no sexistas ni bélicos.
  • Buscar aquellos que estimulen la creatividad.
  • No comprar juguetes que usen pilas.
  • Asegurar que son adecuados a cada tipo de edad.
  • Mirar que sean de materiales naturales y biodegradables.
  • Asegurar que se esté pagando el producto, y no su publicidad.
  • Además, lo más importante es que es posible jugar sin juguetes.

Árboles de navidad y otros adornos

Los abetos y otras pináceas se han convertido en un objeto de consumo de usar y tirar, que va del monte o el vivero al vertedero después de pasar la navidad en una casa. Llama la atención que haya viveros dedicados exclusivamente a la producción de árboles que van a la basura (alrededor de 2.000.000 al año), en un país erosionado y con graves riesgos de desertificación.

Otros adornos navideños suponen también enormes impactos. La utilización ornamental de los acebos en Navidad ha conducido a que se encuentren en grave peligro de desaparición, con los graves daños que esto supone para el ecosistema en el que se desarrollan. Esto mismo ocurre con los musgos, que se utilizan como adorno en belenes.

Por último, la fiebre consumista ha llegado a otras especies vegetales, como los ruscos o el muérdago, que están siendo recolectadas de forma insostenible.


Dónde comprar

A veces pensamos que los únicos lugares donde se puede comprar son las grandes superficies, sin embargo este modelo es muy costoso ambiental y socialmente (para profundizar)

Por eso proponemos una serie de alternativas:

  • Comprar en tiendas del barrio y en los mercados tradicionales.
  • Comprar productos de agricultura ecológica. Estos productos, además de ser más sanos, son ambientalmente sostenibles, ya que en su producción no se utilizan pesticidas ni fertilizantes artificiales.
  • Comprar en tiendas de comercio justo. En ellas se pueden obtener productos con garantías de que han sido producidos de manera ecológica y que se ha pagado un sueldo digno a los productores.
  • Formar parte de cooperativas de consumidores. En ellas los consumidores se ponen en contacto directo con los productores, eliminando de este modo los intermediarios. Todo lo que se consume es de agricultura ecológica.
  • Participar en cooperativas de trueque.Ecologistas en Acción quiere hacer un llamamiento para recuperar la creatividad a la hora de celebrar estas fiestas, una creatividad que nos ayude, en definitiva, a no pasar la navidad persiguiendo los inalcanzables sueños que proponen los anuncios, sino que nos muestre un camino más certero de conseguir nuestros deseos, y que tenga como punto de partida una forma de celebración más justa social y ambientalmente.
     

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