Equo pregunta sobre un reciente incidente de contaminación por cesio en el exterior de Garoña

Desde el Grupo Condeferal de Unidos Podemos – En Comú Podem – En Marea, al que pertenece EQUO, hemos pedido el cese y la reprobación del Presidente del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) en la propuesta de resolución registrada hoy con motivo del Debate del Informe General de las actividades realizadas por el Consejo de Seguridad Nuclear durante el año 2014 y 2015 con números de expediente 401/000001 y 401/000002. Los principales motivos de la petición de cese son: el debilitamiento de la cultura de seguridad, la disminución de la percepción de independencia y neutralidad del CSN en relación al Gobierno y la industria nuclear.

El diputado de En Comú Podem, Josep Vendrell, y nuestro diputado, Juantxo López de Uralde han reflejado en la propuesta de resolución la necesidad urgente del cierre de la Central Nuclear de Garoña pero también han instado al Gobierno a elaborar un proyecto de cierre progresivo de todas las centrales nucleares del Estado conforme a los criterios internacionales.

En este sentido, la propuesta de resolución detalla más 50 propuestas concretas para mejorar la política energética:

• Aprobar e implementar un Plan de Transparencia.
• Hacer públicas las deliberaciones del pleno del CSN y retransmitir en directo, a través de la web del CSN, las reuniones del pleno, garantizando así la máxima transparencia en la toma de decisiones.
• Elaborar un nuevo Plan General de Residuos Radiactivos que actualice la situación y plantee un proyecto realista para afrontar la actual situación.
• Modificar la forma de elección de las personas miembros del CSN para que el nombramiento se haga directamente por votación en la comisión correspondiente del Congreso.
• Presentar ante los Grupos Parlamentarios una propuesta de revisión de la fiscalidad sobre la energía nuclear para garantizar la internalización de los costes de la misma, en especial la gestión de los residuos, y eliminar los beneficios caídos del cielo.

Juantxo López de Uralde ha destacado que “el CSN ha estado al servicio del Gobierno para facilitar su objetivo de alargar la vida de las centrales nucleares”, y es que, en su opinión, “el irregular proceso para el dictamen de Garoña ha minado gravemente la credibilidad del organismo regulador; por eso planteamos toda una serie de propuestas que tienen por objetivo “reiniciar” el CSN para que sea realmente un organismo de control y supervisión de la energía nuclear, y deje de estar al servicio de intereses ajenos a la seguridad. Para ello es imprescindible el cese de su actual Presidente, responsable de la actual situación del Consejo”.

Por su parte, Josep Vendrell cree que “El CSN cumple un papel fundamental como garante de la seguridad nuclear. Precisamente, una de las lecciones de los organismos internacionales que analizaron el accidente de Fukushima es que una de las causas que contribuyó a la gravedad accidente fue la debilidad del organismo regulador, su falta de independencia y la connivencia con la empresa propietaria”.

“En los últimos años la cultura de la seguridad, la independencia y la neutralidad del CSN se han debilitado. Se han avalado decisiones, del Gobierno y a propuesta del oligopolio eléctrico, en relación a Garoña, a la renovación de la renovación de las autorizaciones de explotación de las centrales, que nada tienen que ver con mejorar la cultura de seguridad, que es la misión del Consejo, sino con avalar la estrategia de incrementar la vida útil de las centrales nucleares hasta los 60 años. Las comparecencias en la Ponencia del CSN han dejado en evidencia la falta de independencia del Consejo, por lo que proponemos una batería de medidas para mejorar la cultura de seguridad, la transparencia y la independencia, con el objetivo de que el CSN recupere la credibilidad perdida” ha concluido Vendrell.