Paseo de la Dirección: la AV de Cuatro Caminos-Tetuán y la FRAVM piden la eliminación de las torres y más zonas verdes y equipamientos
- La asociación ha registrado hoy sus alegaciones a la 3ª Modificación del Plan Parcial de Reforma Interior del APR 06.02 Paseo de la Dirección, que ha hecho suyas la federación vecinal.
- En ellas, pide resolver el actual contrato con Dragados, reducir en un tercio la edificabilidad residencial y convertir el lugar en un paseo-mirador, reforzando el papel del parque Agustín Rodríguez Sahagún y protegiendo el Canal Bajo como Bien de Interés Cultural.
El 23 de junio de 1977, el entonces alcalde de Madrid, Juan de Arespachoaga, era recibido en el barrio del Paseo de la Dirección (distrito de Tetuán) con pancartas en las que el vecindario reclamaba zonas de esparcimiento, el asfaltado de algunas calles, la eliminación de charcos infectos y viviendas dignas. 41 años después, estas demandas persisten en el lugar, lo que a tenor de la Asociación Vecinal de Cuatro Caminos-Tetuán, supone una “deuda histórica” con el barrio que las administraciones están obligadas a pagar.
La 3ª Modificación del Plan Parcial de Reforma Interior del APR 06.02 “Paseo de la Dirección”, que fue aprobada inicialmente por la Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid el pasado 26 de julio puede servir para ese fin, pero para ello el Consistorio debería aceptar buena parte de las alegaciones que esta mañana ha registrado la entidad vecinal y ha hecho suyas la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM). De otro modo, sería una nueva oportunidad perdida para avanzar en ese “urbanismo sostenible” que el Ayuntamiento usa como bandera.
En 23 páginas, tras hacer un repaso del complejo y cambiante proceso de reforma del lugar, la AV de Cuatro Caminos-Tetuán lamenta que esta tercera modificación, actualmente en periodo de información pública, incida en “los mismos errores” que ya en 2015 fueron puestos de manifiesto por la propia entidad, la FRAVM y otras asociaciones del ámbito en las alegaciones a la modificación anterior. No en vano, “el desarrollo del Plan, sus dilatados tiempos fruto de los cambios de expectativas de beneficio para el agente privado (Dragados, SA) y las transformaciones que ha sufrido o que se proponen muestran claramente de qué forma esta operación de regeneración urbana ha dependido históricamente de las estrategias y objetivos de una empresa privada más que de los de una administración al servicio del interés público”, puede leerse en el escrito de alegaciones. Ha dependido y “sigue dependiendo”, a tenor de los datos del nuevo proyecto: el 56,8% de la edificabilidad en el conjunto del ámbito, es decir, 11.107 m², se sigue dejando en manos del concesionario.
Ante esto, la asociación vecinal y la FRAVM proponen en primer lugar que se devuelva a la Administración la gestión y propiedad de todo el ámbito, lo que implica resolver el actual acuerdo con Dragados. Y en segundo, además de suprimir las cuatro torres proyectadas en la calle Marqués de Viana, reducir en un tercio la edificabilidad residencial, pasando de los 155.470 m² previstos a un máximo de 100.000 m², a la par que se incrementa el terreno destinado a equipamientos y dotaciones.
Sobre las viviendas proyectadas, el movimiento vecinal sugiere destinar entre un 25% y un 50% del terreno residencial a vivienda pública en alquiler: entre 250 y 500 pisos sobre un total de 1.000 viviendas. Además, debe revisarse la ubicación prevista: “la organización formal de la edificabilidad tiene un claro sesgo clasista. Mientras que la vivienda pública y protegida completa o se añade a la trama original del barrio, el aprovechamiento privado otorgado en pago al concesionario se desarrolla en un frente de fachada volcado hacia las zonas verdes y el paisaje y manifiestamente de espaldas a la estructura y composición morfológica del tejido urbano existente”, asegura el colectivo barrial. Huelga decir que el plan debe garantizar el derecho a una vivienda y a un entorno dignos al conjunto de la población residente en la zona, así como a una “expropiación justa” para las vecinas y vecinos afectados.
Por otro lado, la asociación insiste en una vieja máxima del movimiento ciudadano: “no debiera autorizarse la construcción de vivienda en tanto no se inicien los equipamientos” destinados a dotar de calidad de vida la zona y reducir el déficit existente en los barrios del ámbito (Berruguete, Valdeacederas y Almenara).
Para ello, la entidad propone la construcción de un centro deportivo distrital con pistas de atletismo, polideportivo y piscinas entre la calle Alberdi y el Paseo de la Dirección, a la altura del acuaducto de Valdeacederas; la apertura de una escuela infantil en ese barrio; la creación de un escuela de jardinería en la “zona de reordenación A: Los Pinos”; la calificación del suelo para la construcción de un colegio público y una residencia de mayores en Marqués de Viana, en la parcela reservada para levantar dos de las cuatro torres; y, por último, la apertura de un centro de mayores singular en la calle Blasco de Garay.
Paseo mirador con bienes de interés cultural
Con sus propuestas, la asociación vecinal y la FRAVM refuerzan la idea contenida en el Plan General de Ordenación Urbana de Madrid (PGOUM) de 1986 del Paseo de la Dirección como “paseo-mirador”, favoreciendo la movilidad peatonal y ciclista sobre la motorizada y el papel del parque Rodríguez Sahagún como cuña verde, “clasificando como zona verde los terrenos comprendidos entre el Paseo de la Dirección y el Canal de Isabel II, a fin de mejorar los accesos al parque”.
Uno de los principales valores de la llamada “cornisa de Tetuán” es el paisajístico, sus “vistas”, las cuales se verán seriamente afectadas por la edificación proyectada, algo que ya “se ha puesto de manifiesto con la construcción de un edificio de nueva planta para el realojo a la altura de Isabel Serrano”. Para no abundar en este problema, además de la citada supresión de las cuatro torres con objeto de reducir su impacto negativo sobre las viviendas existentes (soleamiento, congestión…), la entidad vecinal sugiere tratar las calles Capitán Blanco Argibay, Marqués de Viana y Ofelia Nieto como “vías parques” y unificar “los criterios constructivos en parcelas con pendiente en relación con la altura de las cornisas”.
Por último, aunque no menos importante, el colectivo subraya la necesidad de salvaguardar de manera integral el llamado Canal Bajo, una zona que alberga numerosos vestigios arquitectónicos de las primeras traídas de agua del Canal de Isabel II. En concreto, solicita su declaración como Bien de Interés Cultural y la ampliación del ámbito del plan, incorporando los “diferentes elementos afectados por las obras del Paseo de la Dirección: Almenara del Obispo y acueductos del Obispo de Los Barrancos, de Valdeacederas, de Blanco Argibay, de Las Carolinas, de La Traviesa y de Los Pinos”. Hay que señalar que si bien el PGOUM de 1997 prevé la redacción de un plan de protección para las primeras traídas de agua a Madrid, este aún no se ha elaborado. La asociación vecinal destina cinco páginas de sus alegaciones a justificar, con datos históricos y la descripción de sus elementos más singulares, la necesidad de protección del Canal Bajo.
Más allá de estas alegaciones, la entidad ha abierto una petición en Change.org para recoger adhesiones “por un Paseo de la Dirección en Tetuán con un entorno digno, habitable y sin torres”, una recogida de firmas en la que se puede participar a partir del siguiente enlace.
Como se puede ver, la petición incluye las propuestas más importantes del conjunto de alegaciones presentadas hoy.