Europa Laica: «El gobierno israelí debería ser aislado por la Comunidad Internacional con un inmediato embargo de armas y de propiedades en el extranjero»

Comunicado

27/2/2024. Europa Laica, organización que lucha por la libertad de conciencia y, por tanto, por el laicismo como principio indispensable para la convivencia, quiere sumar su voz a las miles que se están alzando contra el genocidio que está teniendo lugar desde hace más de dos meses contra la población palestina.

La Corte Internacional de Justicia ya pidió en enero a Israel que tomara medidas inmediatas para que su ejército no viole la Convención sobre el Genocidio, petición que ese Estado ha ignorado deliberadamente. Pero no solo ha despreciado a este órgano internacional, Israel ha atacado verbalmente al secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, intenta desacreditar a la ONU y a órganos como la UNRWA (agencia de Naciones Unidas para los refugiados palestinos) y a cualquiera que critique su guerra masiva contra una población desarmada, y acusa de antisemitismo a periodistas, intelectuales, políticos, artistas… y a todo aquel que levante la voz contra su ataque contra la población civil.

Europa Laica advierte de la función del fanatismo religioso como combustible para los conflictos de todo tipo, así como de la importancia de las libertades de pensamiento, expresión e información, esta última seriamente dañada por la propaganda que acompaña a todas las situaciones bélicas, que acarrea información sesgada y desinformación, desarmando a la ciudadanía para ejercer la legítima crítica, la disidencia y la protesta.

Las religiones abrahámicas son supremacistas por concepción. La propia Torá, base del Antiguo Testamento cristiano (Biblia) y del Corán, justifica la destrucción sin piedad del enemigo infiel sin distinción de edades. Así se les ha inoculado, así lo expresan sin rubor… Afirman su derecho a ocupar violentamente el territorio que su dios “dijo” que era de sus creyentes hace 2.500 años. Por ello es tan importante dejar de alimentar a teocracias y apoyar a gobiernos laicos y democráticos, que no trasmitan a la infancia supremacismo religioso alguno, justificante de la deshumanización y cosificación del no creyente.

El gobierno israelí debería ser aislado por la Comunidad Internacional con un inmediato embargo de armas y de propiedades en el extranjero… al igual que se hizo con Rusia tras la invasión de Ucrania. No se puede permanecer impasible a la violación del Derecho Internacional. Es urgente articular órganos de decisión sin veto y que el gobierno de España emplee todos los medios necesarios para asistir humanitariamente al pueblo palestino, además de bloquear las bases militares compartidas con EEUU en el uso contra su genocidio.