La CGT inició a pirncipios de año una campaña con el fin de recopilar y a continuación devolver las “ridículas” misivas de la ministra que han supuesto, según declaraciones de la Asamblea, “la gota que ha colmado el vaso de la paciencia de millones de pensionistas que ven cómo, año tras año, recortan un derecho que es esencial para asegurar el presente y el futuro de las personas”.

De esta manera, la protesta organizada en la mañana de la jornada de hoy, cuando aún resuenan los ecos de la masiva manifestación de pensionistas valencianos del día 22, vuelve a poner en evidencia el descontento de un colectivo bregado en la lucha que, recalca un integrante de la CGT “sabe muy bien que los derechos son irrenunciables y que hay que defenderlos frente a los ataques del neoliberalismo. Y no nos van a convencer con propuestas que parecen de broma como la de rebajar el IRPF o subir el 2% a las pensiones de viudedad”.

En el interior del sobre certificado con las cartas rechazadas que recibirá en unos días, la ministra Fátima Báñez encontrará también un escrito de parte de toda la Asamblea anarcosindicalista. Éste concluye con el siguiente párrafo: “No es de extrañar que cada vez haya más gente indignada con estas políticas antisociales y que ese malestar se convierta en protestas en la calle. Tenga usted la seguridad de que la militancia de la CGT –activa, parada o jubilada- va a estar presente en esas previsibles y deseables movilizaciones. Y sepa también que hay muchas propuestas viables para asegurar y mejorar las pensiones públicas. Básicamente se trataría de repartir mejor la riqueza que durante toda nuestra vida generamos la gente que trabaja”.

Estimada Ministra de Empleo y Seguridad Social:

De nuevo me dirijo a usted, como ya hice el año pasado, en respuesta a su carta para informarnos de algo de lo que ya se nos había avisado desde hace meses por los medios de comunicación; que no es otra cosa que la confirmación de que, también en 2018, nuestra pensión subiría menos de lo que lo han hecho los precios en el año precedente. Y digo de nuevo porque el año pasado también contesté –sin obtener respuesta, evidentemente- a su misiva, tan parecida a la de ahora que me hace dudar sobre si ustedes se toman estas cosas en serio.

En esta ocasión le escribo en nombre de la Asamblea de Pensionistas de la CGT-València, recientemente creada para informar y movilizar a la clase trabajadora sobre los muchos recortes que nos esperan si no defendemos mejor nuestros justos derechos; sobre todo el que nos debe asegurar unas pensiones públicas dignas, tal y como se recoge en esa Constitución a la que tanto recurren ustedes cuando les interesa justificar otras actuaciones de su Gobierno.

Lo primero que queremos decirle es que se vuelve a equivocar usted (o quién le haya escrito la carta) al afirmar que las pensiones no se recortan. Algo que no se mantiene en pie si comparamos ese 0´25% de “subida” con el 1´3% que parece se han incrementado los precios en 2017. Lamentablemente estamos hablando de aumento medio, porque productos tan necesarios para las personas mayores como la luz, el gas, las medicinas o la alimentación han subido bastante más. La prueba de que con dos o tres euros de incremento no se puede vivir dignamente es que todos los sueldos y complementos de la clase política han subido mucho más… y eso que hablamos de retribuciones diez veces mayores que una pensión normal.

Tampoco parece más ajustada a la realidad la idea que intentan trasmitirnos de que gracias a una generosidad espontánea de la población hemos conseguido mejorar enormemente los resultados económicos… suponemos que de bancos y grandes fortunas. Y es que, como es sobradamente conocido, los sacrificios a los sectores más pobres son impuestos por las clases dirigentes, y ese crecimiento de la economía (del que tanto presume su partido) se produce como consecuencia del expolio de la gente explotada (la mayoría social) y de la transferencia de dicho botín a las cuentas de los ricos (una reducida minoría privilegiada) como usted debe saber, doña Fátima. De esto último no estamos muy seguros, dado que su recorrido por el duro mercado laboral es prácticamente nulo.

No se priva usted, señora Báñez, en su carta de repetirnos el mantra tan popular (o sea, propio del PP) de los 600.000 empleos creados el año pasado, pero habría que aclararle que en el 92% de los casos se trata de contratos temporales, mal retribuidos y de corta duración (en muchos casos de apenas unas horas a la semana). Empleos, lo que se dice empleos estables, se crean muy pocos y malos. Eso sí, se destruyen por miles en sectores con tantos beneficios como la banca o las eléctricas.

Le adjuntamos a este escrito algunas de las cartas firmadas por usted, que nos han entregado personas cercanas y poco confiadas en el brillante futuro que el Gobierno nos vaticina. Si no le mandamos un paquete mucho más voluminoso es porque no tenemos un presupuesto semejante a los 5 millones que su ministerio se ha gastado para intentar que nos traguemos el cuento de que los pensionistas cada vez vivimos mejor. Por cierto, los sellos de Correos es otra de las cosas que han subido bastante más que el 0´25% de nuestra modesta paga; exactamente las tarifas postales han tenido un alza del 31´60% en cuatro años.

No es de extrañar que cada vez haya más gente indignada con estas políticas antisociales y que ese malestar se convierta en protestas en la calle. Tenga usted la seguridad de que la militancia de la CGT –activa, parada o jubilada- va a estar presente en esas previsibles y deseables movilizaciones. Y sepa también que hay muchas propuestas viables para asegurar y mejorar las pensiones públicas. Básicamente se trataría de repartir mejor la riqueza que durante toda nuestra vida generamos la gente que trabaja.

Saludos y hasta la próxima

Antonio Pérez Collado

Asamblea de Jubilad@s y Pensionistas CGT -València

Marzo de 2018