Riesgos y costos de la gasificación y pirólisis de residuos
Un informe de GAIA, de la que es miembro Ecologistas en Acción, muestra que hay pocos datos disponibles sobre las operaciones de estos intentos de instalaciones comerciales, mientras hay numerosos ejemplos de plantas que se han visto obligadas a cerrar debido a fallos técnicos y financieros.
Esta publicación de GAIA aborda la gasificación y la pirólisis, y explica cómo intentan convertir los residuos sólidos en gas o aceites sintéticos, seguidos de la combustión (lo que significa que están regulados en Estados Unidos y la UE como incineradores de residuos) y los problemas y fracasos asociados. Las empresas han estado experimentando con estas tecnologías durante más de tres décadas. Mientras este informe muestra que hay pocos datos disponibles sobre las operaciones de estos intentos de instalaciones comerciales, hay numerosos ejemplos de plantas que se han visto obligadas a cerrar debido a fallos técnicos y financieros. Otros proyectos han fracasado en la etapa de propuestas -luego de levantar fondos significativos- debido a la oposición de la comunidad y el hallazgo por parte de los gobiernos de informaciones falsas o exageradas aportadas por las empresas.
Se invirtieron más de 2.000 millones de dólares en los proyectos que figuran solo en este informe, los cuales cerraron o fueron cancelados antes de comenzar las operaciones. Entre las compañías involucradas se encuentran Air Products & Chemicals, Thermoselect, Plasco, Compact Power, Caithness, Interserve y Brightstar.
Los desafíos técnicos y económicos para los proyectos de gasificación incluyen el fracaso en el cumplimiento de la proyección de generación de energía, generación de ingresos y objetivos de emisiones. Las plantas de gasificación también han buscado históricamente subsidios públicos para ser rentables. En particular, los vendedores buscan subsidios a las energías renovables. Sin embargo, tales instalaciones emitirán dióxido de carbono a partir de materiales provenientes de combustibles fósiles, incluyendo residuos de plástico y carbón, lo que contradice el propósito de la “energía renovable”.
Llegamos a la conclusión de que los potenciales rendimientos de la gasificación de residuos son más pequeños y más inciertos, y los riesgos mucho mayores que los que aseguran. Los programas municipales que se basan en estrategias de prevención de residuos, separación en la fuente, reciclaje, compostaje y rediseño de productos han demostrado éxito económico y técnico.