Colectivos antirracistas, transfeministas y sindicales se unirán en una manifestación del 1 de Mayo “interseccional”

Este Primero de Mayo se sumará a las tradicionales marchas de los sindicatos mayoritarios por el Día Internacional de los Trabajadores una manifestación alternativa y de carácter “interseccional”.

La convocatoria, firmada por diversos colectivos sindicales y sociales, se ha organizado desde la Plataforma 1M Interseccional, un espacio asambleario que lleva desde finales de 2020 trabajando entorno a esta convocatoria.

“Durante estos meses hemos estado reuniéndonos online, sumando a cada vez más colectivos y manteniendo encuentros virtuales para debatir sobre qué entendemos por clase obrera y

cómo ésta se ve atravesada por el género o la migración”, cuenta María, participante de la plataforma y activista por la sanidad pública.

La marcha está prevista para el sábado 1 de mayo. Saldrá a las 11:30 horas de la Plaza Mayor y recorrerá el centro de Madrid hasta llegar a la Puerta de Toledo, donde tendrá lugar la lectura del manifiesto.

En un comunicado difundido en redes sociales aseguran haberse unido «para alzar una sola voz desde la diversidad». Más allá de los trabajadores asalariados reconocidos, «estamos las que cuidan y ejercen trabajos no remunerados, estudiantes, amas de casa, pensionistas», explican.

Entre sus reivindicaciones incluyen políticas de vivienda como el cese de los desahucios sin alternativa habitacional, la regulación del precio de los alquileres -compromiso que no ha llegado a cumplir el PSOE-, el aumento exponencial del parque de vivienda pública y la movilización de la vivienda vacía en manos de grandes tenedores, «no podemos permitir que haya gente sin casas y casas vacías en manos de la banca y los especuladores».

En cuanto a política migratoria exigen la derogación de la Ley de Extranjería y el cierre inmediato de los CIEs, «no podemos permitir que una situación administrativa creada por el Estado nos condene a la marginalidad, a la falta de derechos sanitarios, laborales, de educación y vivienda».

Piden también la derogación de la Ley Mordaza y la libertad de las personas presas por motivos políticos, así como la abolición de la institución policial y el sistema penitenciario. Esta reivindicación, “abolish the police” o “defund the police” en inglés, ha sido una de las más escuchadas durante las protestas de Black Lives Matter por el asesinato de George Floyd en EEUU. Personalidades como el director de cine Quentin Tarantino, la actriz Natalie Portman, el actor Will Smith o la cantante Miley Cyrus ya se han sumado a esta campaña que empieza a ganar peso en España.

Otras reivindicaciones destacadas son las referidas a la salud mental, donde se denuncian las prácticas psiquiátricas y los protocolos de contención que equiparan a la «tortura».

En el ámbito del trabajo piden la derogación íntegra de las dos Reformas Laborales, el fin de los falsos autónomos y la reducción de la jornada a 30 horas semanales sin reducción salarial.

Incluyen también la derogación de la reforma de las pensiones (2011-2013), el adelanto de la edad de jubilación a los 60 años y la subida económica de las pensiones contributivas y no contributivas «para garantizar una vida digna».

Entre los grupos que participan en la convocatoria hay colectivos antirracistas como Courage, la Comisión Migrante Antirracista del 8M, el Movimiento Wiphala o la Asamblea Antirracista de Madrid, también el grupo de apoyo kurdo Rojava Azadî o la plataforma Yretiemble que prepara en encuentro zapatista de este verano; colectivos de salud mental como el Orgullo Loco o el Observatorio en Primera Persona; grupos feministas como Mujeres Libres o Pan y Rosas; juveniles como la agrupación Contracorriente o la Federación Estudiantil Libertaria; sindicales como la Red de Trabajadorxs Precarixs o los sindicatos CNT y CGT; también colectivos LGTB+ como el Orgullo Crítico, el Orgullo Vallekano, la Plataforma de Encuentros Bolleros, el Movimiento Marika de Madrid o Bisexuales y Combativas; y colectivos por el derecho a la vivienda como el Sindicato de Inquilinas o la Coordinadora de Vivienda de Madrid.