La plataforma 8M Toledo pide el indulto para Juana Rivas
«Es indignante que tengamos que decir, una vez más, que un maltratador no puede ser un buen padre: multitud de casos terribles nos lo demuestran», explican desde la asociación feminista.
Comunicado
Desde la Plataforma 8M Toledo nos sumamos a la ola de solidaridad que está recorriendo el país, tras saberse que Juana Rivas deberá entrar en prisión. Todas tuvimos a Juana en nuestra casa y desde ese día también la tenemos en nuestro corazón y en nuestra lucha feminista del día a día. Porque el único delito de Juana ha sido proteger a sus hijos de un padre maltratador. Porque con jueces que firman sentencias, como la de Juana, el patriarcado se siente cómodo y seguro. No vamos a permitir que Juana entre en prisión por hacer lo que este sistema no hace: poner a salvo de un maltratador a quien lo necesita.
Es indignante que tengamos que decir, una vez más, que un maltratador no puede ser un buen padre. Multitud de casos terribles nos lo demuestran y aún así este sistema judicial podrido de patriarcado les sigue dando custodias compartidas y regímenes de visitas a hombres con sentencias firmes por maltrato. Esto se está permitiendo que ocurra y más tarde en un acto de absoluta y brutal hipocresía hay quién se echa las manos a la cabeza porque ese hombre asesinó a su mujer y a sus hijos e hijas. O porque usó a sus hijos e hijas para hacerle daño a su madre, algo que ahora que se ha puesto en la agenda social, pero que lleva ocurriendo toda la vida. ¿Quién podría imaginárselo?, se preguntan haciendo oídos sordos a tantas advertencias de tantos colectivos, fingiendo una falsa sorpresa que ya no lo es para nadie. Juana no es un caso aislado, hay muchas Juanas. Hace pocos días veíamos como 20 madres denunciaban ante la ONU el maltrato de la Justicia española tras revelar abusos de los padres a sus hijos. Ellas son 20 que se han atrevido, pero hay muchísimas más en la misma situación, víctimas de la violencia institucional que nos ningunea, nos tacha de mentirosas, de locas, nos sentencia a calvarios judiciales que duran años y años con el coste emocional y físico que ello implica.
Juana no puede ir a la cárcel por proteger a su hijo y a su hija de un maltratador. Dentro de unos años, esperamos que no muchos, cuando echemos la vista atrás como sociedad nos parecerán un escándalo y nos indignarán este tipo de sentencias. Igual que hoy nos pasa con otras cuestiones que hace años eran tolerables y hoy gracias al trabajo incansable de tantas y tantas feministas no lo son.
La perspectiva de género, el feminismo con el que pretendemos impregnarlo todo llegará también a los estamentos judiciales. Y nunca más se nos preguntará en un juicio por violación qué ropa llevábamos o qué hicimos para evitarlo. Y nunca más se dudará de nuestro testimonio sobre cualquier abuso. Y nunca más habrá madres como Juana, como tantas y tantas Juanas que tengan que tomar decisiones como las que ella tomó, porque era la única manera de mantener a salvo a sus criaturas.
Pero hasta ese día en el que la justicia esté de nuestro lado y no contra nosotras, las que estaremos de nuestra parte, las unas con las otras, seremos las mujeres. Y ninguna estará sola en esta lucha, ni Juana Rivas, ni Irene Costumero, ni Silvia Aquiles. Ni tantas y tantas otras. No tienen a los jueces de su parte, pero nos tendrán a nosotras para no soltarles de la mano y gritar con ellas hasta que se haga justicia.
Es de justicia que estas madres y sus hijos e hijas estén juntos y a salvo de un maltratador. Parece una locura, pero esto es lo que están, lo que estamos pidiendo. Estar a salvo y con quien te quiere y te cuida.
Juntas contra la justicia patriarcal somos más fuertes.
Juana no estás sola.
Indulto para Juana Rivas ¡ya!