La Plataforma Madrid No Se Toca nace para frenar los recortes de Montoro en la capital
- Representantes de los colectivos que la conforman, entre los que se encuentra la FRAVM, han presentado esta mañana sus objetivos y razones para ponerla en marcha.
- Los grupos sociales alertan de las consecuencias negativas que tendrá en los barrios y sus vecindades la intervención de las cuentas del Ayuntamiento de Madrid.
- El jueves inician una campaña informativa en los distritos que finalizará con una movilización callejera.
Ayer, la sede de la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM) en Lavapiés recogió la presentación de la Plataforma Madrid No Se Toca, una red de colectivos sociales y sindicales y organizaciones políticas de izquierda que surge para tratar de frenar la intervención del Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas en las cuentas del Ayuntamiento de Madrid y recuperar la autonomía municipal. Se trata de una iniciativa independiente del consistorio, que emana de una sociedad civil madrileña muy preocupada por las consecuencias negativas que sin duda va a provocar la tutela económica de Cristóbal Montoro en el Gobierno de la ciudad.
María Ángeles Nieto, coordinadora de Ecologistas en Acción de la Comunidad de Madrid, abrió la comparecencia exponiendo los motivos que han dado origen a la plataforma: “hasta ahora el Ministerio de Hacienda ha requerido al Ayuntamiento la inmovilización de 366 millones de euros, de los cuales este ha acordado la retención de casi 200 millones, pero tiene pendiente la retención de otros 135 millones. A esto hay que sumar las medidas cautelares impuestas por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, que suma otros 275 millones de retención del presupuesto del año 2017. Estas retenciones suponen la privación de proyectos que tienen una finalidad social ya previstos en diferentes barrios. Son actuaciones en colegios, en polideportivos, en centros de mayores, en zonas verdes… que afectan a toda la ciudadanía de Madrid”, ha indicado, antes de subrayar que “las partidas más importantes afectan a algunos de los distritos que más necesitan de esas inversiones”.
Para la portavoz de la nueva red ciudadana, “esta actuación no es una acto de represión sobre la actividad financiera del Ayuntamiento de Madrid sino sobre todas las personas que vivimos en Madrid. Por esa razón, diferentes colectivos hemos decidido crear esta plataforma, para oponernos a unas medidas que son injustas y que no están justificadas, sobre todo teniendo en cuenta la situación financiera del Ayuntamiento, con un superávit de 1.000 millones, con el pago de deuda de un 40%, que además es una deuda creada en buena medida de forma ilegal e ilegítima”, ha remachado.
A continuación, Quique Villalobos, presidente de la FRAVM, en la misma línea, afirmó que “en la mente de Montoro y su equipo no está hacer justicia, sino retener, dificultar el movimiento del Ayuntamiento de Madrid en su función, que no es otra que facilitar la vida de los madrileños y madrileñas”. “Si a partir de ahora en los barrios tenemos dificultades para que se construyan ciertos equipamientos, para que se doten de ciertos servicios o para que se produzca una tasa de reposición de empleos, etc. no va a ser porque Madrid no tenga dinero sino porque hay un Ministerio de Hacienda que se ha empeñado en que Madrid no pueda utilizar su dinero para desarrollar las políticas sociales que se venían realizando”, ha señalado, antes de presentar las acciones que la plataforma tiene previsto llevar a cabo en las próximas semanas.
La primera de ellas tendrá lugar el próximo jueves, 30 de noviembre. Ese día, por la tarde, La plataforma se presentará ante numerosos colectivos sociales en el Centro Dotacional Integrado de Arganzuela. Posteriormente, del 11 al 17 de diciembre organizará asambleas informativas en diversos distritos de la ciudad. “Vamos a preparar materiales con objeto de facilitar que la información de los recortes le llegue a la gente. Con ellos trataremos de explicar por qué una biblioteca que estaba proyectada en un barrio ya no se va a construir o por qué no se van a realizar inversiones en dotaciones y servicios en barrios que llevaban años esperándolas”, ha indicado Villalobos.
Tras esta ronda de presentaciones en los barrios, los colectivos de la plataforma valorarán si impulsan una manifestación en la calle en diciembre o en enero. Dependerá de la evolución de la campaña, una iniciativa “que tiene el objetivo de llegar a los barrios y a los colectivos para que se impliquen en la defensa de las políticas sociales del Ayuntamiento de Madrid”, ha concluido el presidente de la federación vecinal.
Además de Ecologistas en Acción y de la FRAVM, Madrid No Se Vende está conformada a día de hoy por las siguientes organizaciones: Plataforma por la Remunicipalización, UGT-SMD, Ganemos, CGT-Sindicato de Trabajadores de la Administración Pública, PCM, Anticapitalistas, IU, Yayo Flautas, Frente Cívico, CRT/Izq Diario/, La Comuna, Colectivo Lucientes y la RSP.
Durante la presentación de ayer, los integrantes de la plataforma hicieron público el siguiente manifiesto fundacional:
EN DEFENSA DE LA AUTONOMÍA MUNICIPAL
Y DE UNAS CONDICIONES DE VIDA Y TRABAJO DIGNAS
¡MADRID NO SE TOCA!
El Ayuntamiento de Madrid, el más endeudado por la política temeraria de despilfarro y corrupción de los gobiernos del PP, ha conseguido sanear sus cuentas desde que el nuevo equipo de Ahora Madrid se ha puesto al frente a partir de 2015. La deuda, en muchos casos ilegal e ilegítima, se ha reducido un 40 % en estos años, y una vez pagados los vencimientos y gastos de funcionamiento de los servicios, obtiene un superávit de cientos de millones de euros.
El gobierno central, en manos del mismo partido que arruinó a la capital y que se sienta en el banquillo por corrupción, que incumple sistemáticamente los compromisos de déficit que impone la UE, que no es capaz de controlar a muchas Comunidades Autónomas que también lo incumplen, o que hace la vista gorda con ayuntamientos gobernados por ellos mismos, ha intervenido el Ayuntamiento saneado de Madrid con la excusa del artículo 135 de la Constitución, y pretende impedir que pueda disponer de este superávit en la mejora de la calidad de vida de sus vecinos que son quienes aportan su presupuesto.
¿Cómo nos afectaría el recorte de Montoro? Fundamentalmente, saldría de las inversiones en los barrios para nuevas dotaciones sociales y el mantenimiento de las existentes. Por tanto, el perjuicio sería para la mayoría de las vecinas y vecinos, y afectaría a las condiciones de trabajo de los empleados y empleadas municipales. Se trata del destino de nuestro dinero: Para cubrir necesidades sociales o para engordar aún más las cuentas de las entidades financieras.
No lo debemos permitir. Nuestros barrios sufren enormes carencias tras décadas de abandono. Faltan escuelas infantiles, centros culturales, de mayores, de jóvenes, residencias, dotaciones deportivas, servicios sociales… Las plantillas municipales son insuficientes para unos servicios adecuados y muchas contratas mantienen condiciones laborales precarias.
A esta intervención de las cuentas y consiguiente paralización de obras y servicios, se suman otras muchas agresiones que se están llevando a cabo desde el poder central, como son:
Anulación de la negociación colectiva de las condiciones laborales de las y los empleados públicos
Continuas modificaciones legislativas que impiden aumento de plantillas y obstaculizan otras formas de gestión de los servicios más eficientes para el conjunto de la ciudadanía.
La Plataforma “Madrid no se toca”, que agrupa a asociaciones vecinales, sindicatos de clase, organizaciones políticas y movimientos sociales, nace para denunciar estas injerencias, del gobierno central y defender la autonomía de los municipios, administración más cercana a los ciudadanos. Llamamos a la movilización de l@s vecin@s y trabajadores en los barrios, los centros de trabajo y el conjunto de la ciudad, así como al gobierno municipal, para defendernos de esta intervención que pretende poner a los bancos y especuladores financieros por encima de las necesidades sociales de los habitantes. Se trata de nuestras condiciones de vida y de trabajo.