La Policía Municipal de Bilbao incauta material para la venta a miembro de Mboolo Mooye dooley

El miembro de Mboolo no se encontraba vendiendo, ni tenía extendida su manta, simplemente caminaba por la calle, como cualquier otro vecino de Bilbao en un día festivo. Agentes de la policía municipal, lo han identificado y le han requisado todo el material para la venta, que representa su fuente de trabajo.

La identificación racista de este trabajador mantero y la posterior incautación del material, es una muestra más de las políticas discriminatorias de control social – racistas, xenófobas y clasistas – que lleva a cabo el Ayuntamiento de Bilbao y su policía municipal.

Ayer, SOS Racismo y Mboolo Mooye Dooley dábamos una rueda de prensa en el recinto festivo para denunciar la persecución y criminalización que sufre una parte de nuestra sociedad – vecinos y vecinas de Bilbao – que debido a la precariedad de su situación vital, apelan a la venta ambulante como fuente de trabajo para su supervivencia.

Hoy, la respuesta institucional ha sido contundente: Por un lado, el hostigamiento y la represión de los trabajadores manteros, especialmente de la persona, que ayer asumió el riesgo de exponerse y de  visibilizarse en una rueda de prensa, pero que hoy se ha visto empujado a la clandestinidad  – debido al miedo que lleva incorporado – producto de la persecución y represión de la policía municipal. La inferiorización social de las personas sin papeles hace que ni siquiera puedan visibilizarse en la lucha por sus derechos por temor a ser expulsados del lugar en donde viven.

Por otro lado, la respuesta municipal instituye nuevas fronteras internas en nuestra ciudad, entre quienes estamos habilitados para consumir y disfrutar de la fiesta y quienes se convierten en sujetos privilegiados del control y de la represión policial, potenciando la segregación y la diferenciación social entre vecinos.

«Como dijimos ayer en la rueda de prensa y hoy repetimos con más fuerza: Cuando las leyes no son justas, se transforman en una simple relación de mando – obediencia. Y las leyes no son justas cuando provocan o se vuelven indiferentes al racismo, al clasismo y al patriarcado. Para que exista justicia – además de leyes – tiene que existir respeto a la dignidad y a los derechos sociales de todas las personas.
SOS Racismo y Mbolo Moy Doole con el apoyo de la Plataforma Ongi Etorri Errefuxiatuak, queremos denunciar la ilegitimidad e ilegalidad de los controles policiales racistas, la criminalización del colectivo de manteros/as y el racismo institucional de la policía municipal y del ayuntamiento de Bilbao.

KALEA GUZTIONA DA: BIZIRAUTEA EZ DA DELITUA
MANTEROAK ERE JAIXETAN!
La calle es de todas y todos. Sobrevivir no es delito, ser mantero tampoco!»