Euskal Herria: Recrudece la represión carcelaria contra el preso político vasco Iñaki Bilbao

Hoy en día Iñaki es el único preso político vasco que se encuentra en esta clasificación, estando la mayoría de los demás en la segunda fase del primer grado (Art. 91.2 R.P., “inadaptados”), quedando los menos en segundo grado.

Iñaki lleva 10 años en la cárcel de Puerto III, siempre en las galerías de aislamiento. En un principio todos los presos políticos vascos estaban en esas galerías pero, aunque les mantuvieron el primer grado, hace tiempo que trasladaron a todos los demás a los módulos comunes. Además de Iñaki, la única presa política que ha estado en las galerías de aislamiento de esa cárcel en los últimos tiempos ha sido Arantza Zulueta, hasta que fue liberada.

Bajo la cobertura que les da el artículo que le han aplicado, la cárcel sólo saca a Iñaki a un patio de pequeñas dimensiones durante 3 horas, manteniéndole las otras 21 horas encerrado en la celda. Además, sólo mantiene contacto con otro preso, porque le mantienen aislado de todos los demás. Cada vez que sale al patio, los carceleros le pueden cachear. La cárcel tampoco le acepta ninguna otra actividad (deporte, taller, cultura…).

Por si esto fuera poco, en los últimos meses le han prohibido todas las comunicaciones (visitas, llamadas y cartas) con tres personas que forman parte de su núcleo de relaciones, argumentando que estas personas son una mala influencia para él. Están intentando, por lo tanto, dejar aislado del mundo a este preso político, con todo lo que ello supone.

También hay que destacar que Txikito es el preso político vasco que más años de cárcel cumplidos acumula, sumando a los 18 y medio de su primera etapa preso, los 15 que lleva en esta segunda. En total lleva más de 33 años en la cárcel.

Por otro lado, debemos recordar que la de Puerto III ha sido una auténtica cárcel de exterminio desde el mismo momento de su apertura, y que desde el principio ha sido utilizada para experimentar con los presos políticos vascos. El régimen impuesto es de sobra conocido por su dureza, y los carceleros lo son por su actitud militante fascista. En mayo de 2010 le dieron una paliza al elorriarra Arkaitz Bellon, quien después aparecería muerto en Puerto I.

El de Puerto III es uno de los ejemplos más claros de que la cárcel es una institución que pretende romper a la persona y que los presos políticos renuncien a su militancia, dejando al descubierto que los mayores delincuentes y asesinos son aquellos que sustentan las cárceles.

El Movimiento Pro Amnistía y Contra la Represión quiere denunciar la situación de Iñaki Bilbao y la actitud de la dirección de Puerto III. Llevan largos años manteniendo a Txikito en una situación extrema con la intención de asesinarle silenciosamente. Para terminar con situaciones como ésta es necesaria la presión y la implicación de todos y todas, y será la lucha, como lo ha sido hasta ahora, la forma más efectiva para hacer frente a estas salvajadas de los estados.

En Euskal Herria, a 22 de mayo de 2017.