El interés por la situación del colegio Frei Luís de Granada llena la Casa da Cultura de Sarria

Durante más de dos horas, y con la participación de la arquitecta Laura Rodríguez, el arquitecto técnico José Luís Parga, y la ingeniera técnica industrial Lourdes Pombo, así como Xosé Mariño y Pablo Rodríguez, ambos profesores y representantes de CIG Ensino, se destacó desde el punto de vista técnico la inseguridad que el edificio del colegio presenta actualmente, con forjados con deformaciones muy superiores a los límites permitidos, tabiques fracturados y ventanas y puertas totalmente descuadradas, lo que indica que en la intervención de la Xunta en el año 2011 «no se realizaron las obras necesarias para garantizar la seguridad estructural del edificio» por lo que, en la práctica, «durante más de ocho años se puso en riesgo la vida de los cientos de niños y niñas que diariamente asistían a este centro».

Por otra parte, los especialistas pusieron en tela de juicio las conclusiones de los informes técnicos en poder de la Consellería de Educación al basarse en una prueba de carga realizada para determinar la capacidad portante del edificio, lo que permitiría calcular los refuerzos necesarios en los forjados del edificio «pero no la seguridad estructural del mismo».

COINCIDENCIAS CON LAS INFRAESTRUCTURAS DE «O MARISQUIÑO»

«Se descarta la realización de una prueba de carga por tratarse de viguetas pretensadas, ya que con las deformaciones existentes, posiblemente se encuenten en el límite de su resistencia, el cual se sobrepasaría con la prueba de carga, produciéndose un colapso que sería instantáneo por la forma en la que trabajan estas viguetas», afirmaron los expertos, destacando que este tipo de viguetas fue la causante de la tragedia en el festival vigués de «O Marisquiño».

NECESIDAD DE REALIZAR MÁS ESTUDIOS 

En relación al estado actual del CEIP Frei Luís de Granada, los especialistas coincidieron en la necesidad de realizar más estudios en relación con la situación del centro que permitan cuantificar con exactitud los daños reconocidos por los informes actualmente disponibles, dado que se habla de hormigones de mala calidad, catas de forjados que indican la baja resistencia de los mismos y con grandes deformaciones acompañadas de cimentaciones deficientes, entre otros factores, sin que se haya valorado suficientemente el refuerzo de la estructura en aras de la seguridad de la edificación. 

INCUMPLIMIENTO DE LOS REQUISITOS MÍNIMOS 

Por su parte, los representantes sindicales dejaron patente su postura ante el traslado temporal de los escolares a la Escuela Hogar, en un edificio anexo al CEIP Frei Luís de Granada, destacando que en las actuales instalaciones «no es que se incumplan alguno de los requisitos mínimos, sino que no se cumple ninguno de ellos», con graves problemas de accesibilidad para dos alumnas con movilidad reducida, aulas de menos de 15 metros cuadrados para una veintena de escolares, baños compartidos, ausencia de ventilación y una larga lista de problemas que menoscaban la dignidad de alumnado y profesorado y suponen un claro incumplimiento de la legislación vigente.