Reclaman condena al franquismo en el Pleno del Congreso

Reclama además la creación de una comisión parlamentaria que estudie las numerosas tareas pendientes de resolver con el pasado: que el estado se responsabilice de identificar desaparecidos, que digitalice archivos o estudie si las constructoras que utilizaron esclavos políticos deben reparar a sus familias

La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH), la primera en llevar a cabo exhumaciones científicas e identificaciones de desaparecidos por la represión franquista, ha presentado en el registro del Congreso de los Diputados una petición para que en esta legislatura se resuelvan las numerosas tareas pendientes con respecto a las violaciones de derechos humanos que llevó a cabo la dictadura franquista. La petición, dirigida a la presidenta del Congreso y a los portavoces de todo los grupos, reclama sacar el debate sobre el pasado de la bronca ideológica y que se trabaje en la reparación desde los principios y valores democráticos, terminando así con la discriminación que han padecido las víctimas de la dictadura,  con respecto a otras que también han sufrido hechos violentos y sí han sido atendidas por el Estado.

El colectivo solicita una condena unánime en el Pleno del Congreso y una Comisión que estudie Las que considera, entre otras, medidas prioritarias que de las que debe ocuparse:

-La creación de una Comisión Parlamentaria que estudie la situación de las víctimas de la dictadura y tome las medidas necesarias para la aplicación de sus derechos y se centre en: que el Estado se responsabilice de la búsqueda de los desaparecidos; que se lleve a cabo un estudio de todas y cada una de las víctimas de la guerra civil y la dictadura que pueda ser consultado, especialmente por familiares que no saben que fue de sus seres queridos; que se digitalicen todos los archivos civiles y militares relacionados con la represión y se pongan a disposición de la sociedad a través de las redes digitales; que se cree el Día de las Víctimas de la Dictadura Franquista (como ya se conmemoran las del Holocausto el 27 de enero o las del terrorismo el 27 de junio); que se fomenten los contenidos escolares relacionados con la represión, el exilio y la lucha de miles de hombres y mujeres contra la dictadura; que el Gobierno de España se responsabilice del monumento dedicado a los republicanos españoles deportados a Mauthausen, que hasta ahora ha sido financiado y mantenido por los familiares y el gobierno francés; la preservación de lugares de memoria en los que se interprete qué ocurrió en ellos, para convertirlos en lugares de formación humanitaria y pedagogía democrática; la diferenciación en los pasillos del Congreso de los Diputados de los presidentes de la Cámara que han sido  elegidos democráticamente y los que fueron nombrados a dedo por el dictador Francisco Franco; la exigencia al Ministerio de Justicia de facilitar y poner los medios necesarios para todos los procedimientos judiciales que investiguen los crímenes de la dictadura, dentro y fuera de España; la creación de un estudio de todas las obras públicas y privadas que fueron realizadas por esclavos políticos y la determinación que puedan tener las constructoras que se aprovecharon de sus detenciones ilegales; la investigación de todo el daño que padecieron las mujeres, los colectivos de homosexuales y lesbianas y los sacerdotes de diversas religiones que sufrieron persecución por parte del régimen; el impacto que tuvo en la enseñanza la participación de la iglesia católica o la revisión de libros que todavía en el año 2016 siguen imprimiéndose censurados, sin que ninguna institución haya devuelto el texto que les amputó la dictadura.