Redacción •  Memoria Histórica •  11/07/2019

La ARMH espera que el Gobierno investigue todo el patrimonio expoliado por la familia Franco

La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica pide al gobierno que recupere la propiedad pública del Pazo de Meirás y el resto del patrimonio expoliado por el dictador.
La ARMH denunció ante la fiscalía que la casi totalidad de los 30.000 documentos del archivo de la Fundación Franco pertenecen al Estado y deben regresar a los archivos estatales.
La Asociación también pide que se investigue la Fundación Generalísimo, que en los años 40 y 50 se apropió de numerosas piezas, tapices y muebles, de patrimonio nacional.

La ARMH espera que el Gobierno investigue todo el patrimonio expoliado por la familia Franco

La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) espera que la recuperación del Pazo de Meirás por parte del gobierno central sea el primer paso para terminar con el expolio que la familia del dictador Francisco Franco llevó a cabo gracias al uso de la corrupción política y económica y al botín de guerra que el dictador obtuvo mediante los efectos del terror.

La ARMH ya solicitó al Estado que trabaje por la recuperación de los miles de documentos que conserva la Fundación Francisco Franco en su archivo y que según la Ley de Patrimonio Histórico Español de 1985 que dice que son propiedad de su emisor o de su receptor serían propiedad del Ministerio de Cultura

Tras la notificación a la Fiscalía de esa apropiación ilícita, la Asociación recibió la respuesta de que se trasladaba la información al Ministerio de Cultura para ver si precisaba llevar a cabo alguna acción legal para la recuperación de esa documentación, algo que en el último año el Ministerio de Cultura del Gobierno no ha llevado a cabo pese a tener el deber de proteger y preservar el patrimonio público.

Asimismo el Gobierno debería investigar los bienes de la Fundación Generalísimo Franco, una fundación creada al final de la guerra, que mediante la creación de escuelas taller traficaba patrimonio nacional, cómo tapices, cuadros o muebles de importante valor histórico y económico, con los cuales se enseñaba a los jóvenes a trabajar ese tipo de piezas y que en algunos casos no regresaban a las oficinas de patrimonio y eran comercializados expoliados.

También existe una finca en Navalcarnero comprada entre comillas por Francisco Franco con la que su familia hizo un enorme negocio inmobiliario en la que entre otras cosas fueron construidas más de 2000 viviendas.


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