IU recuerda al PSOE que “en Sevilla también tenemos a un genocida fascista enterrado con honores en un templo”

El grupo municipal de Izquierda Unida exigirá en el próximo Pleno del Ayuntamiento de Sevilla al gobierno de Juan Espadas (PSOE) que adopte, de una vez, las medidas oportunas para que los restos de Queipo de Llano salgan cuantos antes de la Basílica de la Macarena, donde este general golpista aún permanece enterrado en un lugar de honor, “para vergüenza y oprobio de nuestra ciudad”.

Así lo ha confirmado este domingo la portavoz municipal adjunta de Izquierda Unida, Eva Oliva, quien sostiene que, tras la aprobación de la nueva ley andaluza de Memoria Democrática y la decisión del Congreso de los Diputados de instar a la exhumación del dictador Francisco Franco del Valle de los Caídos, “se acabaron las excusas para seguir soportando esta indignidad” que supone “un insulto intolerable a las víctimas del franquismo y una ofensa absoluta para los demócratas”.

Oliva ve “bastante paradójico” que el PSOE haya abanderado estos días en el Congreso una proposición no de ley para “sacar a Franco” del Valle de los Caídos y que, sin embargo, en la capital hispalense, donde gobierna en solitario desde hace casi dos años, no se atreva a promover la exhumación del mayor genocida que ha sufrido Andalucía en su historia contemporánea. “¿Por qué Espadas escurre el bulto aquí con este tema?”, se pregunta indignada.

Para Izquierda Unida, resulta injustificable que a pocos metros de las Murallas de la Macarena, donde fueron fusilados miles de hombres y mujeres por defender la legalidad republicana y la democracia, continúen reposando en una iglesia, con todo tipo de honores, los restos de quien ordenó esas ejecuciones. Un criminal de guerra que tiene el dudoso honor de haber sido además el máximo responsable de la represión franquista en Andalucía y que, sólo en Sevilla, dejó a su paso un terrorífico y sanguinario saldo de unas 14.000 personas asesinadas.

Desde IU subrayan que esta situación, inaudita e impensable en cualquier otro país europeo democrático, es contraria al Derecho Constitucional Canónico, que prohíbe la sepultura de no religiosos en lugares de culto, y constituye también una clara vulneración de la Ley de Memoria Histórica estatal y de la recientemente aprobada en el Parlamento andaluz. En la normativa autonómica se deja bastante claro, además, que “los ayuntamientos están obligados a eliminar en un máximo de 18 meses cualquier símbolo fascista”, lo cual incluye también a las iglesias.

De este modo, Oliva asegura no entender “la indiferencia” mostrada al respecto hasta ahora por el gobierno socialista de Espadas. Máxime –añade- cuando el Pleno del Ayuntamiento ha aprobado en este mandato varias mociones en favor de los principios de verdad, justicia y reparación. Y no sólo eso, sino que, en julio del año pasado, la Corporación mostró además, a propuesta de IU, su “repudio” al general genocida Queipo de Llano y manifestó públicamente su “rechazo” a que los restos de este militar golpista continuasen enterrados en la Basílica de la Macarena.

Por todo ello, en el Pleno de este mes “pediremos al gobierno del PSOE que explique cuáles han sido sus gestiones hasta la fecha en línea con este pronunciamiento y le exigiremos que sea valiente y afronte esta asignatura pendiente de una vez”, indica Oliva.

La edil de IU se pregunta a qué espera Espadas para sentarse con el Arzobispado y la Hermandad de la Macarena y para impulsar, sin más dilación, la salida de Queipo de la basílica. Y es que “ésta es la única medida posible a adoptar si queremos que este criminal de guerra no siga deshonrando más a la ciudad de Sevilla y al templo que alberga sus restos”. “Es cuestión de voluntad política y de dignidad democrática, pero hasta ahora el alcalde no parece tener ni una cosa ni la otra”, sentencia.

Queipo de Llano llamando al asesinato y a la violación de mujeres el 23 de abril de 1936:

¿Qué haré? Pues imponer un durísimo castigo para callar a esos idiotas congéneres de Azaña. Por ello faculto a todos los ciudadanos a que, cuando se tropiecen a uno de esos sujetos, lo callen de un tiro. O me lo traigan a mí, que yo se lo pegaré.

Nuestros valientes legionarios y regulares han enseñado a los cobardes lo que significa ser hombre. Y de paso, también a las mujeres. Después de todo esto, estos comunistas y anarquistas se lo merecen, ¿no han estado jugando al amor libre? Ahora por lo menos sabrán lo que son hombres de verdad y no milicianos maricas. No se van a librar por mucho que forcejeen y pataleen.

Ya conocerán mi sistema: Por cada uno de orden que caiga, yo mataré a diez extremistas por lo menos, y a los dirigentes que huyan, no crean que se librarán con ello: les sacaré de debajo de la tierra si hace falta, y si están muertos los volveré a matar.