De la cárcel al cementerio
En Torrero barrio zaragozano, reivindicativo por excelencia, se acuñó este dicho durante la guerra civil y la posguerra.
500 metros separaban la antigua Cárcel Provincial de Zaragoza, llamada Cárcel de Torrero, con el cementerio de la ciudad.
Muchos de los presos que eran “liberados”, acababan en la tapia del cementerio, lugar de ejecución.
El verano del 36, se denominó el verano caliente por el número de detenciones y asesinatos que se llevaron a cabo por todo el territorio nacional y en Zaragoza, la situación estratégica de Aragón era bien conocida, las tres capitales se unieron a los sublevados y comenzó la represión, las detenciones y los asesinatos.
En 1992 vio la luz el libro El pasado Oculto, Fascismo y Violencia en Aragón (1936-1936). de Julián Casanova.
En él se recogen más de 3.500 datos de defunciones de los registros del cementerio, y del registro civil, estos, sirvieron de base para el Memorial que se encuentra en la entrada del cementerio con 3.543 placas, que no 3.543 nombres ya que en más de 600 solo figura hombre o mujer y la fecha de muerte.
Del 18 de julio al 31 de diciembre del 1936, 2.749 personas fueron pasadas por las armas. Siguiendo las consignas del golpista Franco “Salvaré a España del marxismo cueste lo que cueste. No me importaría matar a media España si tal fuera el precio a pagar para pacificarla”.
Y las muertes continuaron, la última que figura en la espiral es del verano de 1946, más de 7 años del término de la guerra.
El ansia de sangre no distinguía ni de edades ni de sexo, el menor 13 años, el mayor 84.
En la mayoría de los certificados de defunción, los que se conservan, la causa de la muerte era “fractura de cráneo por arma de fuego”, para los profanos, el tiro de gracia. “Hemorragia interna“, se supone debido a los fusilamientos.,
Pero a una lega en medicina como yo si que me llamó la atención la causa de muerte el 13 de enero de 1938 de Máximo Quintano, bronconeumonía por arma o la de José Bemarder, neumonía por arma.
Como la asfixia por estrangulación, causa de la muerte de los ejecutados por garrote vil.
Las últimas incorporaciones a este memorial en forma de espiral abierta fueron a instancias de Ángel Fernández, que, aunque sentenciado a muerte le fue conmutada la sentencia por la de cárcel, no así a sus compañeros . José Capdevilla, Alfredo Cervera, Mariano LLovet, Roger Ramos y Manuel Ródenas . Ejecutados el 10 de mayo de 1950.
Pero no todos los asesinados en Zaragoza figuran en esa espiral, tenemos que recordar el asesinato de los integrantes de la II Bandera del Tercio de Sanjurjo, no del todo aclarado, todavía no se sabe a ciencia cierta cuántos fueron pasados por las armas, acusados de fraguar una deserción en masa.
El cementerio de Torrero acoge un monolito en recuerdo de los navarros integrantes en esa bandera, (inaugurado en 2019), exhumados en 1979.
219 navarros de la II bandera del Tercio de Sanjurjo
Nombres del Memorial del Cementerio de Torrero
No son los dos únicos monolitos que recuerdan en el cementerio de Torrero la barbarie franquista, en 1980, Ramón Sainz de Varanda, inauguró un sencillo memorial en recuerdo a los muertos por la libertad y la democracia.
Los datos de todos ellos están incluidos en nuestra web connombreyapellidos.es, consejos de guerra, expedientes de responsabilidades políticas, una breve semblanza de su vida.
Pero en algunos solo su nombre y la fecha de su muerte.
Sirva este esfuerzo, mínimo en comparación con su enorme sacrificio, como homenaje y reconocimiento, poniendo a esos datos numéricos tan fríos, nombre y apellidos, para que nunca caigan en esa segunda muerte que es el olvido.