80 años del fatídico bombardeo nazi sobre Almería
El 29 de mayo de 1937 varios aviones Katiuska confirmaban al gobierno republicano que habían bombardeado con éxito un gran barco de guerra franquista. Sin embargo, cometieron un grave error, el barco bombardeado fue el Deutschland, un acorazado nazi situado en aguas ibicencas. Tras este ataque Hitler convocó un Consejo de Ministros. Su respuesta no se hizo esperar y la venganza fue descargada sobre la ciudad de Almería.
El 31 de mayo de 1937, mientras la ciudad dormía y asomaban los primeros rayos, los almerienses despertaron al unísono cuando la escuadra alemana daba comienzo a su ataque sobre la indefensa ciudad andaluza. Los primeros disparos fueron dirigidos contra las baterías de costa, el puerto y sus instalaciones. Mientras una gran nube negra emergía desde el puerto, cientos de bombas comenzaron a caer por la ciudad destruyendo edificios de gran importancia como la Catedral, la Estación de Autobuses o el Banco Central.
Este ataque, cuyo único fin era el de saciar la sed de venganza del gobierno nazi, se saldó con medio centenar de muertos, 55 heridos y más de cincuenta edificios destruidos.
La noticia de este ignominioso ataque pronto se expandió por todo el mundo denunciando la lamentable actitud de los gobiernos fascistas, los cuales atacaban a la población civil sin miramiento alguno. Por desgracia, el gobierno republicano solo recibió apoyo moral ya que los gobiernos occidentales, acobardados ante la posible internacionalización del conflicto, se limitaron a lanzar meras advertencias que poco o nada afectaron a Hitler y Mussolini.
Sin embargo, la ciudad no se rindió. Las autoridades republicanas pusieron en marcha la construcción, bajo la dirección de Guillermo Langle, de una larga red de túneles que protegiesen a la población. Tanto los partidos políticos como sindicatos y almerienses en general se pusieron manos a la obra. Cuatro kilómetros de túneles, cuatrocientas toneladas de cemento y miles de voluntarios hicieron posible la creación de un refugio con capacidad para albergar hasta 35.000 personas.
Este 31 de mayo se cumplen 80 años del bombardeo que todavía sigue en la memoria de muchos almerienses. Por ello la Asociación por la Recuperación de la Memoria Democrática de Almería ha organizado unas jornadas en las que se homenajearán tanto a las víctimas como a los supervivientes. Las jornadas darán comienzo el domingo 28 de mayo y finalizarán el 2 de junio. En ellas, los almerienses podrán disfrutar de exposiciones, conferencias, teatro, poesía y visitas guiadas. Todo ello con el objetivo de no hacer caer en el olvido estos acontecimientos.
Lo más relevante se producirá el 31 de mayo. Este día se descubrirá una placa en el interior de los refugios que rendirá homenaje a todas las víctimas de ese fatídico día. Además se realizará un homenaje a vario supervivientes del bombardeo.