«Possessor” de Brandon Cronenberg convulsiona Sitges

En el Auditori se presenta uno de los platos fuertes del festival, la nueva película de Brandon Cronenberg. El hijo de David Cronenberg ya realizó su carta de presentación en la edición de 2012 con “Antiviral”, un sci-fi que dejó con muy buen sabor de boca en el festival. En “Possessor”, Andrea Riseborough interpreta a Taysa Vos una agente que trabaja para una corporación secreta, que con el uso de implantes cerebrales toman control de otros cuerpos para llevar a cabo asesinatos, relacionados con oscuros intereses empresariales. Se trata de un body horror en toda regla, con escenas de violencia realmente cruentas y explícitas que llegan a dejar mal cuerpo en el espectador. Ningún problema con esto, a eso hemos venido. Hay mucho de Cronenberg padre en esta película, mucho más que en la citada “Antiviral”. La “nueva carne” está presente, las tóxicas relaciones familiares, la oscura naturaleza humana y sangre, mucha sangre. Pero también hay suspense, como en los títulos de los grandes maestros del género. Todo ello configura una experiencia sobrecogedora y muy emocional, que cuesta trabajo digerir. Cine que hace sentir.

Ya por la tarde decidimos tomar el pulso a la sección Panorama Fantàstic del festival. Se trata de títulos de todas las nacionalidades, inéditos en España, producidos en 2019/2020 y de temática fantástica y de terror, y con vocación independiente.

“12 hour shift” está dirigida por la polifacética Bea Grant, actriz, guionista y realizadora de numerosos títulos entre los que se encuentra “Lucky”, que también se presenta en esta edición del festival. Un grupo de enfermeras de un hospital de Arkansas se saca un sobresueldo con el tráfico de órganos, colaborando con una mafia local. Cuando extravían uno de los órganos, deben arreglárselas para conseguir uno nuevo para la mafia. Aquí da comienzo una delirante serie de sucesos en los que se ve implicado todo el personal del hospital, pacientes, policía y la mafia.

El casting encabezado por la veterana Angela Bettis, no puede ser más acertado, contando con el excepcional secundario de Chloe Farnworth haciendo de rubia tonta, y un rescatado David Arquette en el papel de un asesino custodiado por la policía. Se trata de una comedia de enredo negrísima, con un toque redneck y white trash muy bien escenificado (no en vano la directora es tejana, conoce bien el contexto) que arrancó más de una carcajada en la sala. No pude parar de imaginar lo que hubiera sido esta película de estar dirigida por Tarantino.
Sin salir del cine Retiro nos sumergimos en “The Banishing”. Basada en la historia de la casa más embrujada de Inglaterra, “The Banishing” se traslada a los años treinta, cuando un joven reverendo, su esposa y su hija se mudan a una mansión que guarda un secreto horrible.
Dirigida por Christopher Smith, conocido en el festival por títulos como “Desmembrados” y “Creep”, la cinta retrata con más pena que gloria la el rural de la Inglaterra Victoriana. Es una historia de casas encantadas y fantasmas, que intenta revisar los tópicos del subgénero sin mucho acierto. Los personajes carecen de carisma, las situaciones de miedo no consiguen alcanzar ni la atmósfera ni el clímax esperados y el guión hace aguas por todos lados. Lo más interesante es un guiño a las conexiones con los nazis en plenos años 30 que podían haber explotado mucho mejor. Ramplona.

Este Sitges 2020 también nos dejó la presentación del primer episodio de “30 Monedas”, la serie de Álex de la Iglesia para HBO, que puso en pie a todo el Auditori. Se estrenará en la plataforma en Noviembre.

Quedan muchos títulos en el tintero, algunas películas se estrenarán en las salas españolas, otras no. Un año más Sitges nos ha brindado la oportunidad de ver títulos que nunca llegar a las salas comerciales, de comprobar el enorme talento que hay en las producciones independientes y, en definitiva, de disfrutar del cine con mayúsculas. Estén atentos a la entrega de premios el domingo 18, ya que las películas ganadoras a buen seguro podrán verse en el circuito comercial.

El año que viene regresaremos y se lo volveremos a contar.