EQUO denuncia que la remodelación de la Plaza Vieja de Almería indica que el gobierno municipal no ha aprendido nada de esta pandemia
Los Verdes Europeos de Equo rechazan la aprobación urgente de la remodelación de la Plaza Vieja en plena desescalada de la pandemia, cuando hay otras prioridades que atender, obviando la participación ciudadana.
Los Verdes Europeos de Equo rechazan la remodelación de la Plaza Vieja, por considerar una auténtica desfachatez el hecho de ser aprobada, de manera urgente, en un pleno extraordinario en plena fase de desescalada de la alarma sanitaria; cuando el momento excepcional, por el que atravesamos, exige otras prioridades. Y, sin tener en cuenta, ni una sola de las más de cien alegaciones presentadas por colegios profesionales y colectivos sociales, ambientales, culturales y vecinales, obviando la participación ciudadana, cuya solidaridad tanto se ha destacado para afrontar la situación de confinamiento.
Para su coportavoz, Manuel Pérez Sola, esta aprobación se produce en el peor momento posible. El equipo de gobierno municipal sigue «a lo suyo», aprueba un proyecto de plaza diáfana que a nadie convence, y que supondrá un cuantioso gasto que urge dedicarlo a ayudas sociales y económicas de los sectores más desfavorecidos de nuestra ciudad, para paliar los enormes daños sociales y económicos provocados por la paralización de la actividad a causa de la pandemia y el estado de alarma. Mejor hubiera sido dedicar el pleno extraordinario a impulsar las medidas necesaria para promover un modelo de producción y consumo de proximidad que favorezca la reactivación económica de nuestros barrios.
Desde el partido verde almeriense se resalta la necesidad de atender las debilidades de nuestro modelo urbanístico que la situación excepcional que estamos viviendo ha puesto al descubierto. El hacinamiento por falta de acceso a la vivienda, las viviendas de bajas calidad, la falta de espacios comunes, terrazas y balcones, la ineficacia energética, etc. exigen pasar del eterno debate de la sostenibilidad a la realidad de un urbanismo que coloquen a las personas y la salud en el centro de su diseño. No necesitamos plazas castellanas, sino aumentar el espacio público peatonal, para una movilidad no contaminante que garantice la seguridad sanitaria y reduzca la contaminación, mejorando las zonas verdes y su acceso, así como al de los servicios públicos y privados, aumentar la biodiversidad y la integración de la naturaleza de nuestros barrios y los ejes de conexión, etc.
No son momentos para la especulación urbanística sino para construir resiliencia, impulsando las políticas públicas necesarias que doten a nuestra ciudad de las mejores condiciones posibles para hacer frente a la más que probable segunda oleada del COVID 19. Son momentos para activar medidas que nos permitan afrontar la crisis económica, que el virus ha acelerado, con eficacia y justicia social. Y, son momentos, para afrontar la emergencia climática con medidas para acoplar la economía a nuestro territorio, haciendo un buen uso de nuestros recursos naturales, sociales, culturales y humanos con justicia ecológica.
Por todo ello, Equo Verdes Almería, manifiesta su decisión y firmeza para que, al igual que en el caso del hotel Algarrobico (con más de 15 años lucha política, judicial, y movilización social y ecologista) seguir trabajando de manera cooperativa, apoyando las medidas jurídicas y sociales necesarias para frenar un proyecto que responde a la lógica del urbanismo del siglo pasado, que alenta burbujas inmobiliarias y hosteleras de las que se benefician amiguetes y grupos de presión, a costa del bienestar e impuestos de la ciudadanía.