Comienza la primera legislatura con mayoría de izquierda en la historia reciente de México

México contará a partir de este 1 de septiembre con un Congreso con mayoría de izquierda por primera vez en su historia reciente, desde la llamada transición democrática. Esto como consecuencia del arrollador triunfo electoral del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador.

Una situación que, más que un simple cambio de presidente, evidencia la reconfiguración del régimen político en México.

Un poco de historia

Desde el año de 1968, en que los estudiantes y otros sectores sociales comenzaron a movilizarse para democratizar al país, México nunca había tenido mayoría de un partido de izquierda en las dos cámaras. Y para que eso ocurriera tuvieron que pasar muchos años y muchas cosas.

Con la reforma política de 1977, dos de los primeros partidos de izquierda –el Partido Comunista de México y el Partido Socialista de los Trabajadores–, lograron ganar algunos espacios en un Congreso dominado por el PRI, entonces partido hegemónico.

Sin embargo, no fue sino a partir de las elecciones de 1988 que la izquierda electoral comenzaría a ganar algunos espacios tras la creación del Partido de la Revolución Democrática (PRD).

Desde entonces, la izquierda partidista en México se constituyó como una fuerza política importante que, sin embargo, se vio rebasada durante 30 años por un bipartidismo de derecha encabezado por el PRI y el PAN, impulsores de las políticas neoliberales que el país mantuvo por décadas.

Tras dos cuestionadas elecciones presidenciales en 2006 y 2012, López Obrador decide dejar el PRD y formar un nuevo partido, Morena, el cual compitió por primera vez en las elecciones de 2015 y que hoy, en 2018, se convirtió en la primera fuerza política en obtener mayoría en las dos cámaras en lo que va del siglo XXI, tiempo en que se dio en el país el proceso de la «alternancia» en el poder.

Conformación de un Congreso «lopezobradorista»

En la Cámara de Diputados, conformada por 500 legisladores, la bancada de Morena para la LXIV Legislatura quedó integrada por 247 diputados, que junto a sus aliados PT, con 29, y PES, con 31, logra un total de 307 legisladores.

El derechista PAN quedó con 80, y el PRI, partido del actual presidente Enrique Peña Nieto, alcanzó apenas 47 diputados en una derrota electoral sin precedentes para el partido tricolor.

Otros partidos minoritarios como el MC quedaron con 28 diputados, PRD con 20, PVEM con 16 y dos sin partido, según informó el Secretario General de la Cámara de Diputados, Mauricio Farah Gebara.

Durante la sesión constituyente de la nueva Legislatura, se definió que será el veterano legislador Porfirio Muñoz Ledo, uno de los protagonistas de la transición democrática, quien presida la Cámara de Diputados y quien ponga la banda presidencial a López Obrador.

Un tema que desató controversia, luego de que los diputados morenistas iniciaran los trabajos previos entre gritos: «¡Es un honor, estar con Obrador!». El episodio también sirvió de pretexto para que los simpatizantes del político tabasqueño recordaran las palabras que dijo López Obrador en 2005 cuando compareció en la Cámara de Diputados, cuando sus adversarios políticos intentaron cerrarle el paso para las elecciones presidenciales de 2006.

Lo cual también desató algunas críticas en torno al poder que concentrará López Obrador como el próximo presidente de México, en buena parte, por lo que el politólogo José Woldemberg señaló como una «sobrerrepresentación» de la bancada morenista debido a los términos en que están escritas las leyes mexicanas.

De este modo, la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados quedará conformada del siguiente modo: presidente, Porfirio Muñoz Ledo (Morena); y vicepresidentes, Dolores Padierna Luna (Morena), Marco Antonio Adame Castillo (PAN) y Dulce María Sauri Riancho (PRI).

Prioridades legislativas en el Senado

En el Senado, el panorama no es distinto, ya que el partido de López Obrador tendrá mayoría. De 128 senadores, Morena contará con 58 legisladores, más 6 de su aliado PT y 5 del PES, para un total de 69 senadores afines al próximo presidente electo.

Mientras tanto, el PAN quedará con 24 senadores, el PRI con 14, MC con 7, PRD con 6, PVEM con 6, NA con uno y un senador más que trabajará sin bancada como independiente.

El coordinador de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, señaló que serán seis las prioridades legislativas de su partido, una vez que inicie el nuevo periodo de sesiones en la Cámara Alta:

   · Revocación de mandato

    · Eliminación del fuero presidencial y de funcionarios

    · Salario mínimo

    · Derogación de la reforma educativa

    · Restitución de la Secretaría de Seguridad Pública

    · Modificaciones a la Ley Orgánica de la Administración Pública

La Mesa Directiva del Senado será presidida por Martí Batres Guadarrama (Morena) y los vicepresidentes Mónica Fernández Balboa (Morena), Rafael Moreno Valle (PAN) y Jorge Carlos Ramírez Marín (PRI).

Un hecho que dará al próximo presidente de México posibilidades de sacar muchas de las iniciativas de ley que se proponga, sin necesidad de construir grandes acuerdos con otros partidos políticos.

Algo que no ocurría en lo que va del siglo XXI, y que dará un poder sin precedentes al presidente, desde el año 2000, año en que comenzó la alternancia en el poder.