Organizaciones de derechos humanos denuncian el estado de excepción en El Salvador como abuso de poder
- El parlamento decretó el estado de excepción a petición del gobierno de Nayib Bukele el pasado fin de semana tras una oleada de asesinatos.
- Las autoridades afirman haber detenido a más de 4000 pandilleros en los últimos siete días, mientras las organizaciones acusan al gobierno y la policía de practicar detenciones aleatorias.
Decenas de organizaciones salvadoreñas e internacionales han denunciado la declaración de estado de excepción en El Salvador como abuso de poder. Las entidades denuncian el uso excesivo de la fuerza por agentes policiales, acoso y vigilancia digital a periodistas y personas defensoras de derechos humanos y alegaron que la medida supone una amenaza para la protección y goce de las libertades fundamentales.
Estas acciones del Ejecutivo iniciaron a raíz de que el pasado fin de semana se registraran 87 homicidios en El Salvador, cifra que acabó con el récord perseguido por Bukele sobre la disminución de la tasa de asesinatos y llevó al legislativo a decretar un régimen de excepción para combatir a las muertes atribuidas a miembros de pandillas.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos manifestó ya el martes su preocupación calificando la medida de represiva y advirtiendo que «puede resultar en serias violaciones de los Derechos Humanos de las personas privadas de libertad». La entidad supranacional insta a El Salvador a revertir la medida, así como todas aquellas decisiones que ponene en riesgo la vida y la integridad de las personas que están bajo custodia.
Por su parte, organizaciones como Amnistía Internacional, transmitió mediante una carta abierta al mandatario salvadoreño su rechazo a la medida. La entidad ha señalado que la ausencia de garantías establecida durante el estado de excepción puede conducir a la detención de miles de personas inocentes. En este sentido, ha recogido declaraciones y testimonios de familiares afectados por detenciones indiscriminadas que acusan al gobierno de buscar incrementar las cifras de la acción policial a costa de personas que no pertenecen al crimen organizado.
El presidente Bukele respondió acusando a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y a la OEA por haber patrocinado una tregua que, según el mandatario, fortaleció a las pandillas, en línea a sus recientes ataques a las organizaciones defensoras de derechos humanos.
De igual forma, Bukele aseguró que ninguno de los apresados acusados por pandillerismo y delitos asociados al crimen organizado ha sido liberado.
“No se ha liberado a ningún pandillero. Un juez intentó liberar 42 de un caso del 2019, pero todos continúan en prisión y el caso pasará a una instancia superior. Hago un llamado a la Corte Suprema de Justicia a remover a los jueces cómplices del crimen organizado”, aseveró Bukele.
Más de 4000 detenciones
La Policía Nacional Civil de El Salvador y el presidente Nayib Bukele informaron en la noche del viernes sobre el arresto de más de 4.000 pandillero en los últimos siete días. “La Policía Nacional Civil de El Salvador y las Fuerzas Armadas de El Salvador han realizado 4357 arrestos a pandilleros”, escribió Bukele en su cuenta de Twitter.
Sin embargo, la policía informó sobre 21 nuevos arrestos incluidos líderes de bandas acusados de disímiles crímenes. “Capturamos a 21 terroristas más en las últimas horas, entre estos el palabrero Rafael Arístides Aguiluz, alias Black. Este líder ordenaba crímenes y todo tipo de delitos en varias colonias de San Martín, pero hoy pasará 45 años tras las rejas”, resaltó el ente policial.
El mandatario salvadoreño también resaltó el arresto del Jorge Alberto Urbina, alias Saeta, criminal perteneciente a la Mara Salvatrucha (MS). Asimismo, el presidente apostilló que todos los prisioneros detenidos como parte de esta ofensiva denominada guerra contra pandillas serán ubicados en cárceles de máxima seguridad.