Acusan a pdte. brasileño de filtrar datos del sistema electoral

La Policía Federal precisó este miércoles que el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, cometió un delito al filtrar documentos oficiales para desacreditar el sistema electoral del país a través de redes sociales.

La delegada de la Policía Federal,  Denisse Dias Ribeiro, confirmó que el presidente Bolsonaro cometió un delito al filtrar datos de una investigación confidencial y hacerlos público en redes.

La conclusión de esta investigación, en la que el presidente Bolsonaro está acusado del delito violación del secreto funcional, fue trasladada hasta el ministro del Tribunal Supremo Federal Alexandre de Moraes, quien remitirá las conclusiones a la Fiscalía.

La Fiscalía deberá decidir si denuncia, sigue investigando o archiva el caso, aunque medios locales reconocen que aunque la Policía Federal necesita la autorización del Supremo Tribunal Federal para emitir un proceso, es la primera vez que la Policía imputa un delito al presidente en el marco de las investigaciones bajo la conducción de Alexandre de Moraes.

Jair Bolsonaro divulgó en agosto de 2021 una investigación sobre un ataque de hackers al sistema interno del Tribunal Superior Electoral con la finalidad de invalidar el sistema de votación electrónico, mientras que la semana pasada, el mandatario no se presentó en la sede de la Policía Federal donde debía comparecer, sin embargo esto no impidió que se analizara el caso.

Por su parte, el presidente del Tribunal Supremo Electoral, el juez Luís Roberto Barroso, señaló que “el presidente de la República filtró la estructura interna de las Tecnologías de la Información del Tribunal Superior Electoral”.

“Tuvimos que tomar una serie de pasos para fortalecer la seguridad cibernética de nuestros sistemas para protegernos. Faltan adjetivos para calificar la actitud deliberada de facilitar la exposición del proceso electoral brasileño a ataques de delincuentes”, señaló Barroso.

Bolsonaro, en agosto pasado reaccionó negativamente tras la decisión de la Cámara de Diputados de negar el debate sobre el polémico proyecto de Ley que pretendía cambiar el voto electrónico por uno impreso, que había sido criticado por el mandatario como una estrategia electoral.

El 13 de agosto de 2021 la Suprema Corte de Brasil había abierto una nueva investigación contra el presidente Jair Bolsonaro por difundir en sus redes datos secretos sobre el Tribunal Superior Electoral (TSE) del país suramericano.

La acusación actual contra Bolsonaro se da en un contexto donde la gestión del presidente está marcada por un crecimiento del 13 por ciento del desempleo, 20 millones de personas pasan hambre y más de la mitad de la población vive en inseguridad alimentaria, y la negativa administración con respecto a la Covid-19.

De igual manera, Brasil vive un crecimiento de la violencia policial, la criminalización de la protesta y la proliferación de los desalojos. Asimismo sigue siendo el primer país más inseguro para las personas travestis y trans, pues sigue siendo el primero en reportar la mayor cifra de transfeminicidios en un año, según organismos internacionales.

Entre enero y diciembre 2021, la Amazonía brasileña tuvo su peor año de la década, donde la deforestación creció 29 por ciento con 10.363 km² de selva nativa destruida, según el reporte del Instituto del Hombre y el Medio Ambiente de la Amazonía. Toda esta situación bajo el mandato de Jair Bolsonaro.