Nueva vicepresidenta colombiana llama construir una Latinoamérica «con justicia social»
La vicepresidenta electa de Colombia, Francia Márquez, exhortó ayer lunes a «construir colectivamente» una región latinoamericana «con justicia social» en el contexto de su visita a Bolivia. Márquez, quien en pocos días se convertirá en la primera afrodescendiente en asumir la vicepresidencia de Colombia, inició su agenda con la participación en los rituales por el mes de la Pachamama en La Paz.
Posteriormente el vicepresidente de Bolivia, David Choquehuanca, junto al canciller Rogelio Mayta, algunos ministros y la comitiva que acompaña a Márquez se trasladaron a la sede de la vicepresidencia, donde fue homenajeada con danzas como la saya afroboliviana. Desde allí la activista y defensora de derechos humanos expresó que la Pachamama es el «útero mayor» que está agonizando a merced del sistema neoliberal.
Reuniones con Arce y Evo
El presidente de Bolivia, Luis Arce, recibió a Márquez en la Casa Grande del Pueblo. «Abrazamos con mucho cariño a nuestra hermana, Francia Márquez», escribió Luis Arce en sus redes sociales, acompañando su mensaje con tres fotos del encuentro. Con la afrocolombiana en la vicepresidencia, «los vientos del sur soplan con más fuerza y fortalecen la Patria Grande», agregó el mandatario boliviano, quien confirmó su presencia en la investidura de las nuevas autoridades en Colombia.
La lideresa social también se reunió en privado con el expresidente Evo Morales, el primer presidente indígena boliviano (2006-2019) y actual jefe del gobernante Movimiento al Socialismo (MAS). De acuerdo al equipo del líder cocalero, «trataron diferentes temas, como la integración regional a través de la América Plurinacional». Por su parte Morales destacó que compartieron «experiencias de la larga lucha por los derechos de los más pobres y excluidos de las políticas neoliberales».
Una Latinoamérica «unida, en paz y con justicia social»
Márquez participó previamente, junto al vicepresidente boliviano David Choquehuanca, de una ofrenda a la Pachamama. Al ritmo de las zampoñas, un instrumento de viento de origen andino, Márquez y Choquehuanca bailaron la típica saya cuando ingresó el cuerpo de danza afroboliviana, con sus instrumentos, en una reunión que se llevó adelante en la sede de gobierno.
Luego de los bailes y los regalos Márquez dio un discurso en el que invitó al gobierno y al pueblo boliviano a «construir colectivamente» por una «región latinoamericana, la región del Sur, unida, en paz y con justicia social». El pueblo colombiano ha «tenido que atender a una política de muerte, que en los últimos años ha sembrado la barbarie», con una «guerra absurda que nunca debió ser, que ha costado la vida de miles y miles de colombianos», dijo Márquez, quien procede del Cauca, una de las regiones más golpeadas por el conflicto en el país.
En ese sentido, mencionó que junto a Petro tienen el «desafío de devolver la dignidad» a Colombia y que su elección es «histórica». Colombia «es un país con demasiados movimientos sociales en resistencia» y «como pueblos indígenas, como pueblos afrodescendientes hemos tenido que enfrentar el racismo estructural que nos asesina o que nos deja morir, por eso nuestra presencia hoy es histórica», afirmó Márquez.
La abogada feminista de 40 años destacó que Gustavo Petro es un «líder revolucionario que ha defendido siempre la justicia social, la vida, la paz» y que por ese motivo les «honra a los pueblos» que él sea el nuevo presidente. Por ese motivo acompañará su labor desde la vicepresidencia «desde un legado ancestral» de los que «han sido tratados como los nadies, que han sido deshumanizados».
Colombia «potencia mundial de la vida»
Márquez reiteró que la «apuesta» del futuro gobierno de Colombia será el «buen vivir hacia el vivir sabroso» y aclaró que este mensaje «como pueblos enraizados en la Madre Tierra, en las identidades y prácticas culturales y ancestrales y espirituales sabemos que el vivir sabroso no es más que vivir en dignidad, en armonía» y con derechos.
«Vivir sabroso es reconocernos en nuestras diversidades étnicas, culturales y de género. En ese sentido, nuestro programa de Gobierno crea el programa de Colombia una potencia mundial de la vida, que nos aprestamos a construir de la mano del pueblo», planteó Márquez. Por eso dijo que su gobierno tiene «un desafío enorme de devolverle la paz» a Colombia «y eso implica acciones de gobierno enfocadas a la justicia social».
Visiblemente alegre por la visita de Márquez, Choquehuanca dijo en su discurso que «el sol va a salir para nuestros pueblos. Vamos a reconstruir nuestro Abya Yala, nuestra integridad, para eso hemos venido, para construir la armonía y reintegración de nuestros pueblos y reconstruir la cultura de la paz». El vicepresidente boliviano también sostuvo que se necesita «tejer unidad y armonía» y que ahora desde Colombia se reactivarán «esos espacios de encuentro, de intercambio de experiencias, de intercambio de saberes, de construcción de nuevos conocimientos y generar revolución e ideas».
Francia Márquez visitó Bolivia en el marco de una gira por América Latina que ya la llevó a Brasil, donde se vio con el candidato presidencial y exmandatario Luiz Inácio Lula Da Silva, a Chile, donde estuvo junto al presidente Gabriel Boric, y Argentina, donde mantuvo reuniones con Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner. La activista medioambiental de 40 años tomará posesión oficial como vicepresidenta el próximo siete de agosto, cuando Gustavo Petro asuma como presidente, el primero de izquierda en la historia colombiana.