Trump ordena revisión para desfinanciar ciudades “anarquistas”
Trump ordena que comience el proceso de desfinanciamiento de Nueva York y otras tres ciudades, donde las autoridades permitieron protestas “sin ley”.
El presidente estadounidense, Donald Trump, ordenó el miércoles, en un memorando, a las agencias federales, que envíen informes a la Oficina de Administración y Presupuesto de la Casa Blanca (OMB, por sus siglas en inglés) para detallar los fondos que pueden ser redirigidos de la ciudad de Nueva York, así como de Washington D.C., Seattle y Portland.
“Para garantizar que los fondos federales no se desperdicien de forma indebida ni se gasten de una manera que viole directamente la promesa de nuestro Gobierno de proteger la vida, la libertad y la propiedad, es imperativo que el Gobierno federal revise el uso de los fondos federales por las jurisdicciones que permiten la anarquía, la violencia y destrucción en las ciudades de EE.UU.”, ha dicho.
En el memorando de cinco páginas, el magnate republicano aseveró que “no permitirá que los dólares de los impuestos federales financien ciudades” que se permiten “convertirse en zonas sin ley”.
Mientras tanto, el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, detractor de las políticas del mandatario norteamericano, aseveró que Trump es “el peor presidente de la historia” desde el punto de vista de Nueva York, enfatizando que “lo mejor que hizo” por la ciudad “fue irse”.
A través de su cuenta en Twitter, Cuomo criticó al mandatario afirmando que busca “castigar a Nueva York desde el primer día”, para luego echarle en cara que dejara que el nuevo coronavirus, causante de la COVID-19, “acechara” la ciudad.
Además, recordó que el magnate inmobiliario “no es un rey”, señalando que no puede “desfinanciar” Nueva York, una maniobra que consideró un “truco ilegal”.
Las protestas que se han estado registrando de unos meses a esta parte en varias ciudades estadounidenses comenzaron tras el asesinato, el 25 de mayo, del afrodescendiente George Floyd a manos de un policía blanco en Mineápolis, Minesota, y se han ido intensificado hasta caldearse aún más después de que un uniformado disparase siete veces por la espalda al afrodescendiente Jacob Blake en Kenosha, Wisconsin.
Nada más desatarse las muestras de indignación, Trump decidió anunciar el despliegue masivo de “miles y miles de soldados fuertemente armados” con el objetivo de detener las protestas; sin embargo, dichas medidas lo único que consiguieron fue airar todavía más a los descontentos, que cada vez claman con mayor fuerza que se haga justicia y cese para siempre la violencia racista.
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