Arce revela los motivos por los que la Policía no intervino en el fallido golpe de Estado
El ministro de Gobierno informó que ese día un contingente de agentes estaba preparado por «si las cosas se salían de control».
El presidente de Bolivia, Luis Arce, explicó que la Policía no intervino en el fallido golpe de Estado del 26 junio para evitar enfrentamientos y muertes, como las ocurridas en febrero de 2003.
«El ministro de Gobierno (Eduardo del Castillo) quería sacar a la Policía para sacar a las Fuerzas Armadas de la plaza Murillo, yo le dije:’No, no hagas eso, no queremos lo que sucedió en febrero de 2003‘», destacó en una entrevista con Telesur.
#ENVIVO| Presidente de #Bolivia, @LuchoXBolivia: expresa que dio la orden de no sacar a la policía para enfrentar a los militares, pues no quería repetir la nefasta historia de #FEB del 2003 https://t.co/tqMKHfl0b4 pic.twitter.com/SRlZ0lVYZQ
— teleSUR TV (@teleSURtv) July 3, 2024
El mandatario recordó que en febrero de 2003 en Bolivia «hubo un enfrentamiento entre policías y militares con nefastos resultados para ambas fuerzas«. «Entonces dije: ‘Yo no quiero retornar al 2003, no saques a la Policía'», reiteró.
En 2003, una revuelta conocida como ‘Octubre Negro’, contra un proyecto de exportación de gas hacia EE.UU. a través de Chile, fue brutalmente reprimida por militares, que dejaron un saldo de más de 60 muertos.
«Un contingente listo»
Por su parte, Del Castillo aseguró en rueda de prensa que el día del fallido golpe un contingente de policías estaba listo para disparar «si las cosas se salían de control» cuando Arce se encaró con el excomandante del Ejército, el general Juan José Zúñiga a las puertas del Palacio Quemado.
«Si en ese momento Zúñiga se animaba a detener a Arce, este grupo iba a reaccionar. Es más, cuando fui a la plaza Murillo, la Policía me dijo que todo estaba listo para defender la democracia», comentó.
El ministro reafirmó que el presidente le ordenó que no hubiese despliegues, porque «si la Policía se desplegaba a edificios iba a pasar algo peor que en 2003, y que se debía evitar a toda costa víctimas humanas».
Hasta la fecha ya son más de 20 los aprehendidos, entre militares activos, en retiro y civiles.