Demócratas enviarán mensaje a Trump durante su discurso a la nación

Cada miembro del Congreso puede invitar a una persona al evento, algunas veces llevan a un familiar, pero varios demócratas quieren enviar un mensaje con su convidado, destacó el diario The New York Times.

Por ejemplo, apunta, la representante Alexandria Ocasio-Cortez se presentará con una mujer que sufrió una agresión sexual, mientras su colega Pramila Jayapal estará acompañada por un científico experto sobre el cambio climático.

Por su parte, la legisladora Ilhan Omar tendrá como invitado a un inmigrante liberiano, amenazado con la deportación.

Junto con otros de la bancada demócrata, las tres congresistas irán vestidas de blanco, símbolo del movimiento de sufragio femenino, para resaltar temas como los derechos reproductivos y la igualdad salarial.

El representante demócrata Steny H. Hoyer, de Maryland, entregará a los hombres cintas con ese color.

Nuestro objetivo es mostrar el tremendo paso hacia atrás que nuestro país dio bajo este presidente en materia ambiental, de inmigración y en la protección de los trabajadores y de los derechos reproductivos de las mujeres, expresó ayer Jayapal.

Trump carece de cualquier empatía para comprender el sufrimiento o la difícil situación de otras personas, estimó el legislador Gerald E. Connolly, quien asistirá al acto con Amer Al-Mudallal, un químico nacido en Iraq que estuvo sin trabajar 35 días por el reciente cierre del Gobierno.

Precisamente, este discurso del estado de la Unión está marcado por el fantasma de una nueva paralización, pues el actual financiamiento vence el 15 de febrero, y todavía la Casa Blanca y el Capitolio están lejos de ponerse de acuerdo.

Mientras, los congresistas Lucy McBath, cuyo hijo Jordan Davis fue asesinado 2012, y Ted Deutch, invitarán a personas que perdieron a familiares en tiroteos.

Es poco probable que la nueva presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, de 78 años, apruebe esas acciones de sus colegas de partido pues la veterana política es muy ‘institucionalista y rigorista’, comenta The New York Times

mgt/rob